La Asistente

CAPITULO 15

Al llegar a casa de Gerry, Ricardo me tomo de la mano mientras me guiaba al interior. Me sentí un poco incomoda por el hecho que tenia miedo si alguien nos decía algo.

-Oye, no deberías agarrarme de la mano, nos van a ver y si dicen algo?- le dije mientras caminábamos al interior.

-No te preocupes bonita, solo esta Gerry y Migue y ellos no dirán nada, créeme, son bien discretos.- me guiña el ojo mientras me sonrío a la vez.

Yo solo sonreí y seguí caminando a su lado. Al llegar me detengo a saludar a Gerry , mientras Ricardo se acerca con Migue y también lo saluda. Luego me detengo a saludar a Migue. Ricardo y Slobo se dirigen a sentarse a sus respectivos lugares para comenzar a grabar. Gerry me ofrece un lugar en el sillón detrás de cámaras.

Empiezan la grabación y Slobo empieza a bromear con Ricardo.

-Y haber dinos Ricardo, te veo muy feliz el día de hoy, andas como de muy buen humor, hay alguna razón?- le pregunta.

-Jajajaja , sabía que me ibas a preguntar eso y no, no e fumado, por si piensan que ando alegre por el cigarrito, jajaja.- le contesto.

-Pues veras, han pasado algunas cosas en mi vida que me tiene de buen humor amigo, es eso nomas, no puedo darte mucha explicación.- se sonrió mientras buscaba mi mirada detrás de las cámaras.

-Pero porque volteas para allá wey?, que buscas o qué? Jajaja.- Slobo le dijo mientras sonreía.

-Aaaa no, es que Gerry me estaba haciendo señas pero ya, nada wey jajaja.- dijo nervioso.

Los dos se rieron y continuaron con la grabación. Mientras grababan yo me divertía escuchándolos y admirando a Ricardo, que de vez en cuando volteaba a verme y me sonreía. Me sentía un poco avergonzada porque sentía que veían muy obvio lo que pasaba ente los dos.

Estuvimos aproximadamente 2 horas en el estudio y en ese tiempo tomamos un descanso. Ricardo se levantó de su silla y se acercó hacia mí.

-Bonita, van a pedir algo de comer porque pues, ya hace hambre, vas a querer comer también? Para pedirte algo.- me dijo mientras sacaba su celular.

-Pues sí, ya me dio hambre. Pídeme lo mismo que tu pidas.-le sonreí.

Ricardo se acercó y me dio un beso en la frente, después se alejó para ir con Slobo y preguntarle lo que él iba a pedir.

Pasaron aproximadamente 40 minutos y llego la comida. Migue fue el encargado en bajar a recoger la comida y traerla. Ricardo me tomo de la mano y me guio hacia el comedor para sentarnos uno al lado del otro.

Migue llego y dejo la comida en la mesa, mientras todos se sentaban y repartían los pedidos de cada uno. Mientras comíamos, empezaron a platicar entre todos sobre diferentes cosas. Yo disfrutaba oírlos y reírse de tanta cosa que se les ocurría.

-Y bueno, desde cuando andan ustedes dos de noviecitos?- nos dice a Slobo a Ricardo y a mí.

Yo me quedo en shock sin poder decir ni una palabra mientras volteo a ver a Ricardo quien casi se ahogaba con su hamburguesa mientras Slobo se reía.

-No mames cabron, casi me ahogo con el pan.- le contesto.

-Que?, que tiene de malo?, ya los vimos entrar de la mano y todo, no seas culo wey, jajaja.- le dijo mientras se reía y los demás también.

Yo no hallaba donde meterme, me sonroje tanto que solo me pude quedar callada.

-Ósea no es que sea culo wey, no pues estamos conociéndonos y así verdad?- dijo mientras volteaba a mirarme. Yo solo asentí sin decir nada.

-Y pues ya ven como esta el pedo de la empresa sobre salir con compañeras de trabajo y así, pues espero no se les ocurra decirle nada a Bryan y los directivos de la empresa ee!.- dijo mientras les echaba una mirada amenazante.

-No, como crees, ya sabemos cómo está el rollo aquí, tu no te preocupes.- dijo Gerry

-Y que tal aquí mi bro, si te está tratando bien?, yo lo veo muy feliz, yo creo ya se andan agarrando sus cosas, jajaja- Slobo suelta una carcajada.

-No mames cabron, jajajja como se te ocurre preguntarle eso a Adriana wey- le contesto Ricardo.

Yo, a duras penas le pude contestar algo.

-Como crees, jajaja, todo tranquilo, llevamos todo tranquis.- le conteste mientras me reía nerviosamente.

-Pues es que ya era hora que consiguiera pareja, el wey ya estaba a punto de robarse a mi shakumi- dijo mientras todos soltaban una risa.

Me reí junto con ellos, nerviosa todavía de las cosas que me preguntaba Slobo.

-No te pases de vergas wey, jajaja que puto asco wey, imagínate, ya la usaste tu y luego que la agarre yo, no mames cabron.-

-Jajajaja y luego tu preguntando, ...Slobo porque huele a atún? Jajajaj.- le contesto Slobo mientras todos soltábamos una carcajada.

Así seguimos platicando mientras terminábamos de comer. Ricardo al terminar me ayudo a levantar la basura que habíamos dejado. Me ofreció algo de tomar y me fui a sentar al sillón mientras el me preparaba un trago.

Ricardo se acercó a donde estaba yo, me acerco el vaso con cerveza mientras se acercaba a mis labios para besarlos. Me enrojecí por los nervios de que los demás estaban ahí.

-No pasa nada bonita, no te preocupes.- me dijo Ricardo

Siguieron con la grabación y yo atenta seguí viéndolos y me preguntaba cómo había terminado aquí viendo a Ricardo. Él siempre me había llamado la atención, su forma de ser tan relajada y su bella sonrisa, el tenia algo que llamaba mucho mi atención y conforme lo iba conociendo más me gustaba.

Después de 3 horas, terminaron de grabar y Ricardo se sentó al lado mío en el sillón.

-Oye, quieres quedarte un rato aquí con estos weyes o nos vamos un rato a mi casa?- me pregunto.

-Como tú la veas guapo, por mi esta bien si te quieres quedar- le sonreí.

-Bueno pues mira, yo digo que nos quedemos un ratito y después nos vamos a mi casa, que te parece?-

-Si, esta bien.- le conteste.

Ricardo y yo nos tomamos unas cervezas mientras cotorreábamos con los demás; empecé a sentirme un poco menos nerviosa y más en confianza. Pasaron algunas horas y ya estábamos jugando que prefieres, incluso sacaron ideas para el programa; reímos y seguíamos tomando, eso sí, Ricardo nunca me dejo sola, siempre estuvo al pendiente de si me hacia falta algo para estar a gusto, era un amor.

Se dieron las 11 pm y Ricardo me dijo que nos fuéramos de una vez, antes que se nos hiciera mas tarde. Yo accedí y nos despedimos de todos para pedir un uber e irnos a su casa. En el camino, empezamos a platicar sobre si me había sentido cómoda con sus amigos, yo le contesté que sí, pero que al principio si me sentía un poco nerviosa pero después ya no. Ricardo todo el camino me tenia de la cintura y de ves en cuando me daba pequeños besos, me sentía como adolescente al lado de él, el me hacía sentir mariposas en el estómago.