Cliché │ Eren Jaeger

17 | La antagonista

Ya no me siento personaje principal

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A veces crecer es difícil.

A veces relacionarse con otros es difícil.

A veces quererse a uno mismo es difícil.

En el mundo hay millones y millones de personas, ¿sabes lo difícil que es que una persona corresponda a tus sentimientos? Puf, es demasiado complicado, sobre todo en la adolescencia, donde se ha romantizado ir de uno en uno y experimentar.

¿Alguien piensa en quienes no queremos experimentar? ¿En quienes preferimos ver una película en casa antes de salir a dar vueltas? ¿En quienes sentimos tan profundamente que no queremos que nos decepcionen?

La cruel realidad, es que nadie piensa en la chica que se mira horas y horas en el espejo pensando que su nariz no encaja con su rostro, o que cuando se sienta se le hace un rollito en el abdomen. No piensan en la chica que necesita saber que están bien por temor a que la abandonen, en esa chica que solo quiere ser la primera opción de alguien.

Nadie piensa que Leonor Legrand sea esa chica.

Porque claramente no voy contando mis inseguridades, son mías, y me reservo esos momentos para mí, me he esforzado en tomar en carne propia un personaje. Recuerdo ver High School Musical con Eren y desear ser como Sharpay, siempre hermosa, siempre perfecta, siempre con una respuesta en la boca, y de alguna manera me comí ese personaje, lo tome como mi forma de vida, y olvide que Leonor dormía con una luz de noche, que su lenguaje de amor es materialista, que la razón por la que quería a Eren, era por la confianza y tranquilidad que le entrega.

Después de tanto, olvidé porque quería a Eren, y fue por eso que no caí en cuenta que Eren hace tiempo dejo de ser ese Eren.

Olvide que nada es para siempre, olvide preguntarle a Eren como se sentía, olvide que no éramos nada.

A veces entender que algo está roto es difícil, muy difícil.

Porque no había más que pelear, no había más que buscar, Eren había roto todo lo que nos unía de la peor manera posible, nuestra relación estaba construida a base de mentiras y engaños, él no quería estar conmigo, pero tampoco me quería dejar, el solo quería ser totalmente egoísta y eso me llevo a ocupar el papel de villana en su historia.

Y eso es lo que iba a ser a partir de ahora.

Como sorpresa final, Paradise había ganado a Marley, pero prácticamente no me había enterado por haberme desmayado, en realidad no, me bajo la presión y fueron segundos de inconsciencia, razón por la que Jean no quería ir a la fiesta.

Pero yo iba a ir, e iba a volver a tomar el lugar que me correspondía.

- ¿Estas ebria? -me pregunta Porco al oído, la música es muy aturdidora. No me ha soltado la mano en toda la noche, temiendo que vuelva a sentirme mal.

- ¿Por?

-No te voy a besar si estas ebrias, Leo. No de nuevo, quiero que lo recuerdes.

Sus labios son muy calientes en comparación a Eren, y no es un desesperado en besarme, al contrario, va lento, tranquilo, cálido y dulce, dejándome con ganas de más y más, como un efecto embriagador que te hace querer correr en un desierto si eso significa obtener más de él. Porco parece ser el único lago en todo el puto mundo, te hace alucinar con él, y simplemente no puedes negarte.

Insisto en acercar su cabeza más a mi si eso es posible, y en respuesta me aprieta contra su cuerpo de forma que siento cada prenda, su calor me abruma y su perfume me quiebra los sentidos.