Volver a Empezar [ Kim Namjoon / Lee Minho]

💫3

La voz grave de Min-ho a mis espaldas me saco de mis
pensamientos y recuerdos.

- Mamá conserva todo cómo lo deje.

- Dijo a mi oído mientras abrazaba mi cintura.

- Lo sé, es como si siguieras aquí, incluso tu aroma está impregnado aquí.

- Así es, pero ahora quiero quiero tu aroma y algo más impregnado aquí.

- Susurró apretando más su agarre, una suerte de corriente eléctrica recorrió mi cuerpo junto con una mezcla de temor, mi cuerpo aún estaba sensible y con dolor.

- Amor no creo que sea prudente aquí, tus padres estan en la habitación de enfrente.

- Respondí con temor.

- Seré cuidadoso, te dije que te trataré bien.

- Dijo besando mi cuello y metiendo una de sus manos en el escote de mi blusa, mis senos doloridos dieron señal de alerta cuando uno de mis botoncillos fue ligeramente apretado sacando un quejido.

- Duele amor, aún no puedo.

- Lloriquee temerosa.

- Vamos amor, me vas a dejar así ?.

- Rezongo llevando una de mis manos hacia donde estaba su prominente bulto en su pantalón.

- Por favor hoy no, mañana en casa si?

- Respondí sacando la mano de su entrepierna y liberandome de su agarre.

- Entonces me vas a dejar exitado? Con esta erección del porte de un mástil de velero? . Aveces me preguntó que sigo haciendo a tu lado Aera!! Eres una inútil, no sirves para satisfacerme como hombre.

- Bufo con severa molestia, aquí está una vez más Lee min-ho en su máxima expresión sacando fuera su lado oscuro

- Min-ho, no por favor, no te enfades, solo que hoy no.. estamos en casa de tus padres y mi cuerpo aún duele, dame hasta mañana.

- Mis palabras salieron temerosas de mi boca, trate de calmarlo pero fue inútil, su ira ya fue desatada.

- De que me sirve que espere hasta mañana, si vas a seguir siendo la misma inútil de siempre, debería de buscar una mujer que si me llene y a ti desechar como la basura que eres.

- No tienes por qué ser hiriente conmigo, yo no te he hecho nada malo a ti, tampoco te he faltado el respeto.

- Como sea eres una inútil, ahora quédate aquí sola yo me largo de aquí, atente a las consecuencias.

Aseveró tomando su chaqueta saliendo de la habitación a paso rápido.

Me quedé sola en esa habitación con un nudo en la garganta y con el corazón hecho una bola dentro de mí.

Me dirigí al clóset ya que en esa casa teníamos ropa y todo lo necesario para tener una estadía cómoda.

Me dirigí a la ducha y me di un baño rápido, salí envuelta en una toalla quedando de frente al gran espejo de cuerpo completo, en el cual sin el maquillaje y desnuda se notan mis marcas. Decido tratar de olvidar eso y me puse mi pijama para ir a la cama.

Trate de conciliar el sueño más no logro dormir mucho, pase horas dando vueltas en mi lado de la cama totalmente en vano, cada palabra que me dijo antes de salir de repetía una y otra vez sin cesar de seguro el ya debe de tener otra mujer y está conmigo solo para guardar las apariencias.

No me di cuenta cuando ya había amanecido y tenues rayos de sol entraban por rendijas de las cortinas.

Pronto sentí unos suaves golpes en la puerta.

Mi incorporé y me dirigí hasta ahí para ver quién era.

- Buenos días hija el desayuno está listo!! Bajen a desayunar, Min-ho está en la ducha? .

- Mi suegra saludo con su clásica voz cálida, quebrando mi escasa estabilidad que tuve que reponer pues no debo de demostrar ningún atisbo de tristeza para debilidad y menos con ella, así es que busque una excusa de peso para que se quedara tranquila.

- Min-ho se fue más temprano Omma, aquí no tenía cambio para ir a trabajar así es que se fue antes del amanecer, me pidió que me disculpara con ustedes en su nombre.

- Hoo ese niño, se fue sin despedirse de nosotros, bueno eso no importa el se pierde de las maravillas que hay para el desayuno. Vamos a desayunar juntas hija.

- Bajo enseguida Omma me daré una ducha y voy con ustedes, no tardo.

- Está bien te esperamos abajo, no tardes

Después de cerrar la puerta a mis espaldas solté un gran suspiro, sin más me di una ducha de agua fría para despertar, me arregle y maquille para bajar a desayunar.

Después de acabar de desayunar subí a la habitación para hacer limpieza, después de eso fui hasta el baño para lavar mis dientes, de pronto sentí un malestar seguido de náuseas y devolví todo lo que había desayunado. No le di mayor importancia seguro que es estres o comi demasiado.

Al paso de unas horas más el chófer de mi suegra me llevo de regreso a casa que se encontraba vacía, un escalofrío recorrió mi cuerpo al pensar que era lo que se venía cuando mi esposo llegue a casa.

Cosa que no paso, no llego este dia, tampoco el que le sigue y el que le sigue y así paso una semana en que no regreso a casa y tampoco atendía si celular.

Lo que si no dejo de llegar durante todos estos días fueron las náuseas y vómitos, lo sigo atribuyendo al estrés y preocupación de no saber nada de mi esposo.

Hola buenas noches les dejo un beso a todas las amo ♥️.