12 De Junio - Shincal / Hora - 12: 25 Pm
Mientras el equipo se recuperaba del impacto de la pérdida de Gael, Steven encendió su encendedor, iluminando la oscura cámara. Para sorpresa de todos, notaron que el aire no estaba estancado, sino que fluía en dirección a una abertura en la pared.
—¿Sienten eso? —preguntó Steven, asombrado por el descubrimiento.
—Parece que hay una corriente de aire. ¿Será una salida? —se preguntó David, anticipando la posibilidad de una revelación.
Ambos siguieron la corriente de aire que los llevó a un estrecho pasadizo. Tras unos minutos de caminata, llegaron a un espacio más amplio donde el aire fluía con más fuerza. Al mirar hacia abajo, descubrieron un pozo profundo que se perdía en la oscuridad.
—Este pozo debe conducir a alguna parte. Tal vez sea la salida que estábamos buscando —dijo Steven, asomándose con cautela.
David asintió, compartiendo el entusiasmo por la posibilidad de encontrar una vía de escape.
—Pero parece muy profundo. ¿Cómo bajaremos? —preguntó Helena, examinando la abertura.
—Olvídalo no podemos hacerlo. Aunque el aire bien de abajo —contesto Steven mientras prendía su encendedor.
—Diablos, ¿Qué creen que encontraremos al final del pozo? —preguntó David, emocionado por la misteriosa travesía.
Steven arrojo una piedra al pozo y segundos después se escucha un chapoteo distante.
—¿Agua? —exclamó Steven, con asombro en su voz.
—¡Increíble! ¿Cómo puede haber un lago aquí abajo? —preguntó Helena, asombrada por la inesperada maravilla.
—Cuando llegamos al castillo habían canales de agua. Supongo que es parte del rio de la selva —respondió Cesar.
David examinó el pozo con detenimiento.
—Podría ser un conducto natural que nos lleve a una parte desconocida de la selva. Pero también podría ser peligroso descender sin saber qué hay abajo ya que esta oscuro.
—Dios, deben haber 20 metros de profundidad —comento Steven.
El equipo se alejo del pozo y se sentaron en las rincones sin saber que hacer.
Himeya se quedó un momento en silencio, sus pensamientos envueltos en la tragedia que acababan de descubrir. Sin que los demás se dieran cuenta, su mirada se posó en la mano de Gael, donde sostenía un collar desgastado.
—¿Qué es esto? —murmuró Himeya, recogiendo el collar con cuidado.
Al acercar el collar a la luz tenue, reveló una medalla Azul que tenia tallada un halcón blanco, un símbolo que capturó la atención de Himeya. Era un detalle que hasta ese momento había pasado desapercibido para él y sus amigos. La medalla relucía, incluso en la tenue luz de la cámara subterránea. Era un amuleto finamente trabajado que representaba al misterioso Suprenimal. Al final, El chico tapa con las mantas el cuerpo de Gael.
El pozo, un oscuro abismo que se extendía frente a ellos, emanaba una atmósfera cargada de misterio y peligro. Himeya se acercó al borde del pozo y miró fijamente hacia abajo.
—Tenemos que bajar y descubrir a dónde conduce esto. Podría ser nuestra única oportunidad de encontrar una salida—declaró Himeya, con la mirada fija en el equipo.
David, Jhon, Cesar, Steven y Helena intercambiaron miradas, expresando sus dudas y temores.
—Himeya, no podemos simplemente lanzarnos a lo desconocido sin saber lo que hay abajo. Podría ser peligroso —advirtió David, cruzándose de brazos.
ESTÁS LEYENDO
Las Crónicas De Victory®
Novela JuvenilPrecuela/Spin-off de: Iniciativa Caídos: Ciber-Amenaza ❇Las vacaciones de verano del 2015 están a la vuelta de la esquina: para Himeya, de 17 años. Solo quedan una semana antes que se mude a Buenos Aires con sus padres: lejos de sus mejores amigos D...