❝ TaeHyung nunca fue un omega común. ¿Qué es lo que lo hace especial?, es extremadamente fértil. Podría crear un clan completo de lobos fácilmente si lo deseara. Debido a esto, sus celos son más fuertes que los de un omega normal, y sus feromonas má...
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TaeHyung estaba poniendo todo su esfuerzo porque no se notará que acababa de entrar en celo y el hecho de estar encima del alfa, con nada más que su sudadera, no ayudaba para nada.
— TaeHyung... ¿Estás en celo? — y se fue a la mierda su ideal de simulación.
— S-Sí, ¿me harás daño? — preguntó el jadeante y sudoroso omega.
— No haré nada que tú no quieras, te cuidaré todo lo posible — JungKook no sabía por qué, pero sentía la necesidad de cuidar al pelinegro.
JungKook continuó caminando en silencio, ignorando a su alfa que le pedía a gritos detenerse, recostar al omega sobre la hierba mojada y hacerlo gritar de placer hasta que quedara sin voz. Pero no quería asustar a TaeHyung, quería cuidarlo y complacerlo.
Mientras, en la espalda del alfa iba el pelinegro agarrando su pene para que este no tocara el lomo del lobo, solo quería llegar pronto, comenzaría a lubricar y mojar la espalda de JungKook sería lo más vergonzoso del mundo.
Después de caminar unos minutos más, llegaron a una hermosa cabaña en medio del bosque.
Claramente de pequeña no tenía nada, era casi una mansión en los árboles.
Subieron, y al entrar TaeHyung quedó doblemente impresionado.
De verdad que era hermosa, ¿qué tan millonario será JungKook como para mantener una cabaña así en medio de la nada?
— ¿Quieres algo de comer, pequeño? — preguntó JungKook, el pene de TaeHyung dio un salto ante el apodo, realmente este celo estaba siendo muy fuerte.
— Está bien — respondió bajito, pero audible para el alfa.
Ambos comieron un poco de ramen instantáneo, se divirtieron bastante y hablaron de diversos temas.
De un momento a otro, TaeHyung recibió una fuerte punzada en su vientre que lo hizo jadear sin poder evitarlo. Su olor se hizo mucho más fuerte y comenzó a soltar feromonas, ni siquiera tenía supresores, no tenía idea que su celo se adelantaría.
El lobo se JungKook saltó y rasguño fuerte en su pecho, suplicando que tomará a ese omega y lo hiciera suyo.
— ¿TaeHyung? ¿Estás bien? — habló con la voz ronca, el alfa, excitando aún más al omega.
— A-Alfa, t-te necesito, mmm — jadeó entrecortado el pelinegro, al levantar la vista vio que el chico tenía los ojos amarillos indicando que su omega había tomado el control.
JungKook no quería aprovecharse del estado sensible del omega, pero tampoco lo dejaría con dolor toda la noche.
— Ven aquí, omega — Habló con su voz de mando, haciendo que el pelinegro mostrara su cuello en forma de sumisión, luego se dirigió al alfa obediente.
>> Te ayudaré con el celo, pequeño — JungKook tomó a TaeHyung y lo levantó, haciendo que este enroscara sus fuertes piernas en la cadera del alfa.
