XIV. Problemas de pareja II

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Alberu no tuvo de otra más que morderse el labio, suspirar y hablar.

Haz lo que debes si sabes lo que te conviene.

Probablemente nunca pueda ocultarle algo a Cale, al igual que él, Cale es sensible cuando se trata de su pareja.

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“Entonces es así”

Después de que Alberu hablara sobre el asunto en el palacio Cale frunció el ceño, con su dedo dio ligeros golpes a su rodilla pensativo.

Después de unos segundos habló con calma.

“Entonces ve al palacio”

Alberu suspiro con impotencia a sabiendas de que algo como esto pasaría.

“Sabía que dirías eso, por eso no quería decírtelo”

“¿Qué está mal? Ahora estoy bien, ¿no? Puedes irte tranquilamente al palacio”.

Cale hablo con indiferencia, como si fuera algo que a él  no le concierne.

Ahora era el turno de Alberu de ver a Cale con un ceño fruncido. Sus siguientes  palabras contenían su preocupación.

“Ja, tranquilamente? Y que pasa si de repente  vuelve tu amnesia, he? ¿Qué hay del dolor? Y ni hablar de los posibles síntomas de los que aún no sabemos nada. No voy a irme así, no puedo evitar preocuparme más si estoy lejos de ti”

Cale también frunció el ceño pensando en algo.

“Estoy bien, incluso si vuelve, hay una poción para el dolor,  además, no dijiste que estoy bien con los niños? Entonces estaré bien, puedes irte”

Alberu apretó los dientes. Ninguno de los dos quería dar un paso atrás provocando que el aire a su alrededor  se tensara poco a poco.

Fue en ese momento cuando los niños entraron con un carrito de té, los niños no entendieron porque el ambiente  era tan pesado, aguantaron la respiración inconscientemente cuando entraron.

Hong es un niño inteligente pero inocente. Habló en este ambiente, aparentemente acostumbrado.

“Noona, ¿Ellos volvieron a pelear?”

“Así parece”

On asintió mientras palmeaba la cabeza de Hong con suavidad. Entonces Raon hablo.

“Humano, por qué volviste a discutir con el príncipe galleta?”

Cale bufo.

“No discutimos, es solo su alteza siendo terco”

Alberu frunció nuevamente el ceño cuando oyó a Cale decir eso. El ambiente alrededor de la pareja que ya se había suavizado cuando vio a los niños entrar se volvió a tensar un poco.

“No es así Raon-nim, es Cale quien está siendo terco”

On sirvió el té mientras decía.

EL DIOS DE LA MUERTE ESTA ABURRIDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora