Iniciación A La Insanidad

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¿Eran muy amables contigo?

Bastante.

¿Exactamente cómo es que terminaste en sus vidas? ¿Realizaron algún proceso de adopción?

No en un principio, mi historia es algo compleja y hasta difícil de creer. En pocas palabras, yo buscaba a mi padre en la ciudad y casualmente me encontré con ellos, confundí a Kazuki Kurusu con mi padre biológico porque son muy parecidos y creí que Rei era mi tío o algo así.

¿Tu madre te permitió venir a la ciudad tú sola?

A mí madre nunca le importó lo que sucediera conmigo en realidad, admito que hubo un tiempo en donde ella se portaba muy amable y benevolente, pero nunca faltó la ocasión en donde me restregara en la cara que yo era un maldito error, que era igual de molesta que mi padre biológico. Era una niña, así que no la comprendí muy bien, por eso nunca sentí ningún odio a Kazuki, claro, porque en ese entonces creí que él era mi padre.

¿Y cuándo fue que empezó todo este problema? Tuvo que haber un punto de quiebre que te llevara hasta donde te encuentras ahora, que es confinada en una cárcel femenil de máxima seguridad.

–Uff... Bueno... Todo ésto empezó el año pasado... Días después de visitar a mi madre y unos antes de mi cumpleaños número diesiocho. Ahí fue cuando la porquería explotó en mi cara...

–Hey... ¡Hey, Miri!

Papá Kazuki chasquea sus dedos en mi campo de visión y parpadeo de forma exagerada, me estoy quedando en el aire.

–¿Está con sus problemas hormonales de nuevo?

Como siempre el sarcasmo de papá Rei no falta en la casa. Volteo a verlo por unos segundos, pero lo que más me llama la atención es la facilidad con la que carga el arma de su personaje del videojuego qué está probando, es muy preciso.

Sí, parezco estúpida dejándome llevar por un simple juego subido de tono, pero juro por mis zapatos de Channel, no puedo dejar de pensar en las asquerosas palabras de mamá.

Mis padres... Mercenarios

No... Definitivamente es una maldita mentira de esa perra frustrada, lo que pasa es que ya quedó loca de tanto fumar hierva y esas cosas.

–Miri me estás preocupando, hace días que no te veo con apetito y ni siquiera has traído a tus amigos a verte al menos por un rato... Claro, no me molesta que ya no tenga que ver la cara del insufrible de Taiga pero..

–Papá ya basta, ¿Sí? Me duele la cabeza, ¡Ya!

Se queda callado cuando ve mi explosión repentina y mira como he colocado mis manos en mi cabeza mientras veo el suelo.

Dios, ya no puedo seguir con esta insertidumbre, pero es que me parece una teoría tan tan estúpida lo de tener padres asesinos que hasta cuestiono mi salud mental.

¿Debería ir a un psicólogo? ¿Hablar con el consejero escolar o..?

¡No Miri! ¿Qué tal si todo es una jodida broma? Haría un alboroto por nada y podría quedar expuesta. ¡Miri la canica zafada!

–¡Oh mi pobre niña tiene su regla otra vez!

Eh??

Papá Kazuki toma mi mejilla y la pellizca levemente, luego de eso se levanta de la silla del comedor y se adentra a la cocina sacando ingredientes de la despensa: Tomates, papas, cebollas, entre otros.

–No hay nada que un buen guisado no pueda arreglar, así que tranquila Miri, papá Kazuki se hará cargo de levantarte el ánimo.

–¿Acaso no lo has notado? Ella está nerviosa porque su cumpleaños dieciocho se avecina. La puerta de la adultez se está abriendo y con eso sus pier...

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⏰ Última actualización: Dec 08, 2023 ⏰

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¡HEY, MIRI! [Buddy Daddies]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora