(...)
—Izuku-kun, ¿dónde estás? Llegaremos tarde a la foto familiar. Tengo tu traje de marinero —dijo Inko, visiblemente preocupada mientras buscaba a su hijo de 8 años en la tienda de juguetes y figuras de acción en el centro comercial, donde se suponía que él estaría.
Mientras tanto, la niñera asignada para cuidarlo estaba en medio de un ataque de ansiedad, con lágrimas recorriendo su rostro, incapaz de encontrar al pequeño señorito.
—Mi señora, no encuentro a su hijo. Se suponía que él fue a comprarse una figura de su ex novio, All Might. Lo siento mucho, pensé que lo vi entrar a la tienda —comentó preocupada la niñera, disculpándose con su jefa al mismo tiempo.
Afortunadamente para ella, su empleadora parecía más preocupada por su hijo y estaba en pánico.
—No te preocupes, Liz. No eres la primera niñera que mi hijo burla y escapa...
De repente, todos los estantes de la tienda levitaron en busca de su hijo, pero solo encontraron empleados asustados acorralados en un rincón debido al poder emanado por la líder de los Midoriya, quien, por cierto, tiene un primo que es el accionista mayoritario de la compañía que les da trabajo.
—¡Maldita sea! ¿Dónde estará? —se quejó Inko al darse cuenta de que su hijo definitivamente no estaba allí.
Lo que más le preocupaba era que en este país, podría haber personas que quisieran secuestrar o hacerle daño a su hijo. Rusia no era un lugar donde un niño debería estar libre por ahí.
Mientras tanto, un grupo de hombres armados de la milicia Midoriya destrozaba la tienda y otras tiendas cercanas en busca del heredero.
A la vez, el señorito Izuku Midoriya tenía sus propios planes...
(...)
En un oscuro rincón de un barrio marginal de Moscú, Rusia, se encontraba una arena de peleas clandestinas. El ambiente era sórdido y opresivo, con el sonido de las apuestas y los gritos de emoción llenando el aire viciado. A medida que alguien se adentraba en el lugar, se podían ver filas interminables de gradas ocupadas por una multitud variopinta de personas ansiosas por presenciar el espectáculo.
La arena en sí estaba rodeada por alambres de púas y luces tenues que apenas iluminaban el escenario. Las paredes descascaradas y los techos agrietados daban testimonio del descuido y la decadencia del lugar. El aroma a sudor, alcohol y humo de cigarrillo se mezclaba en el aire, creando una atmósfera asfixiante.
Entre la gran multitud de peleadores, destacaba un niño enmascarado con una máscara de kabuki y una pequeña capucha que ocultaba su rostro. Su presencia era un enigma en medio de aquel sórdido escenario. A medida que avanzaba en la fila de peleadores que buscaban gloria y fama en el mundo criminal, los murmullos y las risas burlonas se hacían más fuertes.
Obviamente, el idioma ruso era predominante entre los comentarios del público.
—¿Quién es este niño? Seguramente lo van a destrozar —comentó entre risas un miembro de la multitud a un amigo cercano.
El niño "misterioso", quien sabía muy bien el idioma, era plenamente consciente de los cientos de comentarios de los espectadores, pero nunca le importó. Ahora era el momento de demostrar por qué será el Rey del Harén que este mundo va a conocer.
Finalmente, llegó el turno del niño enmascarado. El jefe de la arena, un ogro gigante y musculoso, lucía una vestimenta rusa tradicional adornada con detalles dorados y una gorra de piel de oso que le confería un aspecto aún más intimidante. Su mirada desafiante y su expresión feroz dejaban en claro que era el mandamás de este lugar.
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Por el bien de los mundos! Me casare! (BHNA/RWBY)
Hayran Kurgu[Fanfic Crossover] Los humanos del planeta tierra habían llegado muy lejos con la ciencia y su curiosidad por el universo los hizo capaces de crear portales a través de las diferentes realidades que existen. Siendo Remnant, el primer mundo que hizo...
