Mi hermano es mi Mate©

Capítulo 18: Un fatídico recuerdo

Narra Abel

Cuando uno está desesperado por encontrar una solución a un problema, hace todo lo posible para resolver ese conflicto. Pero hay veces que uno se ve obligado a cometer actos que van en contra de su voluntad y a veces... solo lo hacen por puro gusto. Aunque no sé si podría decir que yo estoy aquí por designio.

Estuve oculto por varias semanas, pero lo que no entiendo es como pudieron dar conmigo. Bueno, solo estamos hablando de una sola persona, mi hermana. Aún así no puedo comprender como supo dónde me encontraba. Las estrategias para ocultarme estaban bien hechas, pero por lo visto no funcionaron tan bien como lo habíamos planeado.

Hice mal con desaparecerme de repente, dejé a mi amada mate expuesta al martirio, pero por milagro divino, pudo liberarse de de las garras de la muerte.

Con solo recordar aquél momento que desde entonces permaneció dentro de los acontecimientos más nocivos de la historia de nuestra ex-manada, después de los ataques de los Nefilims hace muchos años.

**Flash Back**

—Vampiros... Un clan de vampiros están invadiendo nuestro territorio son demasiados y algunos son agresivos—dije con repulsión.

—¿Y tú vas a salir a enfrentarte a ellos?

—Obvio que sí. Es mi deber defender el territorio.

—Mmm...—dudó mi hermana—Por favor... te quiero vivo...

—...—me quedo de espaldas y en silencio por unos segundos—Ya vuelvo—dije y finalmente cierro la puerta dejando a Chloë encerrada en el sótano. Es mi mate, y estamos esperando un lobito juntos, y lo que menos quiero es que le pase algo, por eso, voy a enfrentarme a estos vampiros impidiendo que hagan de las suyas.

Salgo de la casa, y varios vampiros se encontraban levitando tirando veneno, otros peleaban a muerte con varios alfas de la manada. Era todo un caos, es como si la mismísima tercera guerra mundial se armara dentro de este territorio, habían cuerpos tirados en algunas partes, era una completa masacre.

Tomé mi forma canina dirigiéndome a uno de ellos, y con mis dientes filosos arranqué parte de su rostro dejándolo desfigurado, con chorros de sangre blanquecina saliendo de la herida que le dejé y después incrustando mis largas garras en la zona del corazón. Es así que pude matar como a 6 de ellos, pero justo cuando vi a un vampiro entrar a la casa es donde quise ir detrás de él para impedir que lo haga, porque sabía que encontraría a Chloë pero otro me había tomado del cuello interceptándome.

—Un momento ahí lobito—mencionó una voz ronca.

—Suéltame asqueroso vampiro—forcejeaba y pateaba para que me suelte de su agarre.

—¿Y si no quiero?

—Voy a tener que matarte.

—Dudo mucho que eso sea posible—añadió incrédulo. Aún así me soltó y no dudé en tirármelo encima, pero algo me detuvo. Mi cuerpo inmóvil, quedó en la misma posición que mantuve para atacar.

—No creas porque te haya soltado vas a hacerme algún tipo de daño lobo inmundo—se acercó amenazante—¿O acaso no recuerdas lo que hiciste con mi hermano?

—¿Hermano? ¿De qué estás hablando?—pregunté confundido.

—Mmm veamos... ¿El nombre de Williams te suena conocido?

En ese momento me di cuenta que se trataba de aquél chico que una vez lo torturé hasta agonizar y finalmente enterrarlo bajo una cabaña abandonada. Lo recordaba perfectamente, era aquél sujeto que alguna vez le hizo la vida imposible a mi hermana junto con otros de sus cómplices. Quién diría que un compañero de clases de mi hermana sería un vampiro y nadie se dio cuenta.