Intentare ayudarte -TR

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Con una mano sosteniendo una receta medica junto a una notificación de descanso, caminaba Keisuke queriendo entender lo que le acaba de decir la enfermera de la escuela despues de que lo mandara a llamar junto a Meins antes de la hora del almuerzo.

—¿Me puedes decir como es posible que vomitases tanta sangre como para que parte de tu codo se haya manchado desde tu brazo e incluso así ayer no dijiste nada y te veias normal caminando y quejándote eternamente del club comiéndote incluso dos tazones de arroz en la noche?

—Que clase de pregunta es esa.

Caminando un poco más apartada de él pero al miso ritmo, la otra rodaba los ojos sin querer verlo al ser descubierta.

Ayer cuando paso todo intento convencer a la enfermera que estaba bien y habia vomitado "porque se resbalo" mientras entrenaba, escapando luego en un descuido de la enfermera llevandose la notificacion sin dejar que la rellene al no saber quienes eran sus apoderados. Yendo a casa como si nada hubiese pasado.

Pero hoy despues de que Baji la llevara arrastras a la enfermeria despues de haber sido llamados, todo lo de ayer se descubrio.

"...la directora me informo que ella es el apoderado temporal de Meins, y me pidio que todos sus informes médicos te los pasase a tí. "

Fue una parte de lo que le dijo antes que explicara todo lo de ayer. Mientras transcurría palabra por palabra se sentia como la mirada a traves de sus lentes del pelinegro querian hacer cualquier cosa, menos la paz. 

—Si, tienes razon, no fue una buena pregunta. —respirando hondo giro a los costados asegurandose que no haya nadie— Dime, ¿como carajos sigues de pie despues de haber vomitado toda esa sangre que indica aquí? No, perdon, más importante. ¿Por que carajos no dijiste nada?

Tirandole uno de sus diccionarios de bolsillo en la nuca para que le hiciera caso esta volteo a mirarlo por fin.

— ¡Hey eso duele! 

Comenzando a pelear entre murmullos para que nadie los escuche, parecian bien entretenidos en ello, que solo pararon cuando entre reclamos Meins recordó algo.

—Mi cabeza esta en mal estado por el batazo y vienes a tirarme eso.

Chasqueando la lengua lo miro molesta mientras masajeaba la parte donde le había caído el golpe.

— ¿De que hablas?

Deteniéndose cuando se estaba agachando para agarrar el mini-diccionario volteo a mirarla. Para luego enarcar una ceja extrañado.

—¿Batazo?

Sin notar lo que dijo por un momento tosió acomodando su voz para reclamarle como era posible que lo haya olvidado, intentando despues ella tambien analizar lo que acababa de decir quedando sus palabras en la boca. Antes si quiera de que puedan decir algo felizmente la campana de la hora del almuerzo sonó, cambiando el ambiente con las voces de los estudiantes ya queriendo salir al almuerzo.

Suspirando y terminando de guardar el minidiccionario solo se acomodo las gafas como si nada pasara. 

— ¿Estas segura que no vomitaste tú cerebro en vez de sangre? —haciendo señas con su mano de que esta loca le dio la vuelta alejándose— cada día estas más anormal. 

—¿...A donde vas?

Sin voltear a verla regresaba por donde habian llegado.— A comprar una bebida. Ve comiendo tu bento, —prendiéndose una chispa en su cerebro entre risas hablo con un tono burlón— mi mamá cuando se entere de lo que paso ayer, capaz que te va a destranformar toda la cara.