Capitulo XI

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25 de Junio, de 2019

Mi padre llegaría hoy. Se que no será un encuentro fácil. Más porque tendré que enfrentarme a mi hermanita, que se que no parará de preguntar por James.

—Tranquila Holly, todo saldra bien. — Mar me pone una mano en el hombro, intentando calmarme —. Yo estaré aquí para ti, y te ayudaré a hablar con Bri.

—Ya hablé con ella hace unos días, le dije algo que la dejo un poco más tranquila, pero, se que preguntara, y se que va a querer verlo. ¿Cómo le puedo decir que el murió?, es imposible.

—Lo sé, pero, en un futuro, ella lo sabrá. Así que no te estreses ahora por como le dirás esa noticia. Ella de a poco lo entenderá.

—El era importante para ella. A veces incluso pensaba que lo quería más a él que a mí. — Susurro —. Recien me estoy dando cuenta que James no solo dejo un vacío en mi y en su familia, sino que en más personas.

—No te atormentes más cariño. — Me da un pequeño beso en la mejilla —. Vamos, ya no tardan en llegar.

Tal como ella dijo, cinco minutos después, tocaron la puerta. Yo no fui capaz de abrir, así que Mar fue la que no hizo.

A la primera que veo entrar es a Bri. Que viene corriendo a darme un abrazo. Yo la alzó en brazos mientras que camino hacia mi padre, con los ojos llenos de lágrimas.

—Cariño... — El deja un beso en mi cabeza, y nos abraza. Lo necesitaba a papá, más de lo que creía.

Al separarnos y bajar a Bri, voy hacia Jesse que me veía con una sonrisa. Yo le doy un abrazo, que ella recibe gustosa.

—Gracias por venir. — Susurro.

—No tienes que agradecer nada, Holly.

Después de un rato, y de haber comido algo. Por fin llegó el momento de hablar.

Bri estaba en mi habitación junto con Mar, que la llevo a dormir.

—¿Cómo has estado? — Jesse, toma mi mano, y espera a que yo hablé.

—No ha sido nada fácil — Aprieto su mano, buscando algún apoyo —, no me esperaba que eso sucediera. Nadie de hecho.

—¿Por qué no nos avisaste hija?, también teníamos derecho a saber lo que había pasado. Tendría que haber estado contigo en estos momentos de dolor.

Mi padre, que no había hablado mucho desde que llegó. Me veía con los ojos vidriosos. Se que le debía muchas explicaciones.

—Papá, creeme que no era mi intención ocultar lo que sucedió. Solo que, no tenía mente, ni fuerzas para llamarte. Todo sucedió de la nada.

Jesse me abraza. Yo solo dejo que ella me consuele. Lo necesitaba porque ya no sabía que más hacer con el dolor que llevaba dentro.

—Ni siquiera podía comer los primeros días. Además, paso el cumpleaños de James...era, no, es todo un desastre. Nada está bien, y no tuve de otra que irme con Alex y Emilia.

—¿Qué sientes?, debes sacar todo lo que guardas dentro. No puedes cargar con tanto dolor cariño. — Ella sobaba mi espalda. Mi padre se acerca, y me abraza.

—Que lo extraño...que no puedo seguir levantándome en las mañanas y ver qué no está.

Ellos no dicen nada más. Solo me abrazan, y dejan que lloré. Al poco tiempo, Mar se une a nosotros.

—Se que no es el mejor momento, pero...Bri quería que te diera esto.

Me entrega un papel. Al verlo, era un dibujo. Estaba James, Bri y yo. Los tres tomados de la mano.

Quizá en otra vida, fuimos tu y yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora