Capitulo 15.

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*Andrea*

Gire sobre mi eje rápidamente y me helé al encontrarme con Manuel a unos pocos centímetros de mí, él no dijo nada sencillamente tomo mi brazo con su muñeca firmemente, pero teniendo cuidado de no hacerme mucho daño y me obligo a subir con él las escaleras a pesar de que intenté zafarme de su agarre. Cuando llegamos a la habitación de invitados de la que él tenía la llave se me congeló la sangre, le suplique que me soltara pero no lo hacía, aproveché que se distrajo sacando la llave de su bolsillo y me zafe huyendo por el pasillo, corrí en vano ya que Manuel me agarro por la cintura y me elevó sobre su hombro, tomó la el borde de mi vestido y lo bajó un poco cuando dos idiotas pasaron por el pasillo y se quedaron viéndome.

Dentro de la habitación pude ver cómo le colocaba el cerrojo y se quitaba los zapatos, pensé en ese instante que Manuel seguía siendo el mismo y que esta noche cruzaría los límites y se iría para siempre, que saciaría sus ganas y me dejaría para luego pedir perdón y que terminaría aceptándolo de nuevo por que no he sentido con nadie lo que siento con él y soy tan estúpida como mazoquista, pero no fue así; me miro frunciendo el ceño por mis lagrimas que ya asomaban y me  dejó en la cama. Se acostó cerrando los ojos y apoyando su cabeza sobre su brazo.

Le mire confusa y segundos después abrió los ojos. Los tenía ligeramente rojos.

-No te haré nada que no quieras, si te traje aquí es porque necesito hablar con alguien y tú eres la única en quien confío plenamente – hizo una pausa y me miro intensamente- si quieres irte puedes hacerlo solo quiero confesarte algo antes-

-No me iré – dije luego de un corto silencio - ¿Qué me vas a confesar? – pregunté.

-Me tenías mal con tu baile pequeña - murmuró con una sonrisita como si recordara lo sucedido hace poco.

-Jaja - me reí- la verdad no sé qué me paso, seguro fue ese extraño zumo que mezcló Melody para mí.

-Jajaja - su risa... profunda, varonil, única - te drogaron mi Andy – sonrió con más fuerza al ver que me ponía toda roja.

-Ya... no te burles – le dije haciendo un puchero.

Manuel me contó sobre su padre y todo lo que ha estado haciendo estos días, ira a la universidad el próximo año y está buscando un apartamento al que se mudara en verano, ya que esa es la fecha limite que su padre le dio.

La universidad ya lo ha admitido  y queda a treinta minutos saliendo de la ciudad lo cual me alegra ya que no me hacía mucha ilusión que se marchara justo cuando estamos tomando confianza, instintivamente me acomodo un poco mejor y apoyo mi cabeza en su pecho sintiendo su corazón latir con fuerza mientras me cuenta todo con detalle y acaricia mi hombro haciendo círculos con su índice en mi brazo, no recuerdo cuando me dormí, estaba realmente muy cansada.

***

 Al día siguiente desperté sola en la cama y me di cuenta de tres pequeños detalles; no tenía mis zapatos, estaba cubierta con una manta calientita y en la mesita había un gran vaso de agua y dos pastillas; me lo tome sin pensarlo dos veces ya que el dolor de cabeza me estaba matando y arregle la habitación. Abajo me encontré con Josh que me dedico una sonrisa dulce y me tendió una bolsa de basura y unos guantes indicándome que limpiara las escaleras y el pasillo de arriba, obedecí y me apresure a hacerlo ya que en menos de tres horas debíamos estar presentes en el cumpleaños de la abuela, lo cual sinceramente no me apetecía en lo más mínimo por que tenía una resaca que ni los dioses de mitología griega alcanzaron a tener.

Recogí confeti, vasos sucios, gorros, envoltorios de chuches, servilletas y cientos de cosas raras que me daban la sensación de que yo no conozco nada del mundo. Encontré a mi prima Abba en el baño principal con una completa cara de asco, y me reí de ella, a mi solo me había tocado el pasillo muajaja. Luego recorrí el pasillo cerciorándome de que todo estuviera bien recogido y noté que la puerta de la habitación de mis tíos estaba abierta, entre a ver si todo estaba en orden y mi casi se me cae la cara del susto.

Pegué un grito. 

Estábamos perdidos.

Estábamos perdidos

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