Capitulo 19.

9 2 0
                                    


*Andrea*

Todo es como antes, pienso en él a cada minuto, mi estomago se revuelve cuando lo veo y mi corazón da brincos cuando me besa. Y tengo miedo; miedo de que sea la misma ilusa de antes, y que cuando se vaya a la universidad consiga a alguien mejor y deje atrás a la niñita con la que alguna vez tuvo algo. Tengo miedo de ilusionarme nuevamente y que todo salga mal. Miedo de dejar de ser suficiente para él y que deje de importarle. Todo es tan perfecto que me asusta despertar y descubrir que solo fue un sueño. Sin embargo ya me he pellizcado las suficientes veces para saber que no estoy soñando y que esta es mi realidad, por muy a cuento de hadas que suene.

Ayer cumplí 16. me envío un mensaje a las 00:01a.m. felicitándome. No fue a la escuela pero me fue a buscar y me llevó a almorzar luego de haberle pedido permiso a mis padres. No pudimos estar todo el día juntos porque debía prepararse para la exposición con su tío, para compensarlo me prometió que hoy, luego de ir a la exposición sería todo mío. Le ha ido muy bien con sus pinturas y el día de hoy promete ser mejor aún.

Estoy en mi habitación y él está sentado en mi cama, apenas y le he visto llegar, cuando me volteo a verle, sus ojos analizan con detenimiento mi vestido marrón que se ciñe un poco a mi cuerpo en algunas partes, y cae suelto con una pequeña abertura en la parte de abajo para que yo pueda caminar bien claro está. Su mirada me inspecciona de abajo hacia arriba haciéndome sentir nerviosa, cuando de repente brinca de la cama de un salto y se para frente a mi mirando mis labios sin disimular antes de agarrarme por la nuca y unir nuestras bocas.

-Estás preciosa, como siempre – me dice y veo ese brillo tan singular en sus ojos.

-Tu tampoco estas nada mal, guapo – le digo devolviéndole la sonrisa.

Bajamos y me despido de mis padres, hace poco que Manuel ha comprado un auto nada barato, de veras que le está yendo de maravilla con sus pinturas. Quién lo diría empezó dibujando rayones a los tres años, luego fue el mejor de su clase de arte y ahora va a ser reconocido en la ciudad por que sus pinturas lo son todo, reflejan sin número de sentimientos y te hacen identificarte al punto de sentirte incluso celosa de que son tan perfectas como te gustaría ser.

En el evento su tío nos presenta a muchos pintores y clientes. La mayoría nos miran y me hace sentir incómoda. Él, por supuesto, está tranquilo, se percata de que no me encuentro cómoda y sostiene mi mano en todo momento. Abrazándome de vez en cuando ante la mirada de todos.

***

La exposición de arte fue todo un éxito y logro vender todo a muy buen precio, parecía muy feliz cuando me dejo en casa prometiendo llamarme en una hora. Entre sonriendo a casa, comimos helados gourmet antes de llegar a casa entre besitos y risitas bobas, pero la cara de tristeza de mi padre me recibió en la puerta junto con Jeff. Mi madre y Josh no estaban por ninguna parte.

- ¿Está todo bien? – pregunté claramente asustada.

-No hija, no está nada bien.

- ¿Por... por qué? ¿Pasa algo? ¿Dónde están mamá y Josh?

-Tu madre y tu hermano están en el hospital – espera ¿Qué? – Josh se le descubrió cáncer de medula ósea y necesita un trasplante urgente, ninguno de nosotros puede donar excepto tu ya que al ser su hermana melliza las probabilidades en este caso son del 100%, te voy a pedir Andrea que no coloques excusas, mañana mismo en la tarde te harán los exámenes correspondientes y si es posible harán la operación el mismo día ya que no hay tiempo que perder, debes entender querida que la vida de tu hermano depende de esto, así que creo que no hay nada que cuestionar ¿o sí?

No podía procesar todo, ¿una cirugía? ¿Josh enfermo? Ni siquiera se habían parado a pensar en los riesgos que correría mi vida si algo salía mal, pero era la vida de Josh la que corría más peligro en este instante, debía aceptar, luego me quedaría tiempo para lo demás supongo.

-Andrea ¿sí o no? – insistió mi padre sacándome de mis pensamientos.

-Si padre, - respondí pensando en Josh, ante todo.

-Eso esperaba, mañana tu madre te esperara y al llegar de la escuela irán al hospital, tu madre hará tu maleta y todo, tu solo duerme y come bien ¿sí? – asentí con la cabeza y me agradeció, aunque no supe bien por qué.

Todo me daba vueltas mientras subía las escaleras a mi cuarto. Esa noche Manuel no me llamó, supuse que se había olvidado, igual no estaba de ánimos para contestarle, solo quería dormir y olvidar que la vida de mi hermano ahora dependía de mi.

*Manuel*

Llegué a casa con una sonrisa en mi rostro, era uno de los últimos días aquí y ya había empezado a empacar todo, de repente vi que mi habitación tenía la luz encendida desde la ventana y mi corazón se detuvo, por un momento me quede paralizado pero luego subí corriendo y para mi desgracia total lo que vieron mis ojos fue peor de lo que esperaba, mis pinturas, las que había dejado esta mañana secándose tenían rasguños, manchas y algunas estaban totalmente arruinadas; las creadoras de este gran desastre; mis dos hermanas pequeñas que apenas me vieron entrar huyeron. Todo estaba destruido y probablemente mi tío me sacaría de su contrato, no podía crear tantas pinturas en tan solo una semana, no era por el tiempo, sino la inspiración, estos días los había pasado bien anímicamente y mis pinturas lo reflejaban. 

Me arrodillé entre todo el desastre, no me importaba que se me manchara la ropa. Lloré como casi nunca lo hacía. Mis pinturas eran mi esperanza para salir de casa y terminar de pagar el auto y el apartamento, tendría que vender ambos y suplicarle a mi padre para que me dejara quedarme. Lo que más me dolía era tener que explicarle a mi tío que no tendría las pinturas listas para cuando le tocara viajar y que lo había defraudado. Y a Andy... su pintura, en la que trabajaba por las noches estaba rota y manchada, su regalo estaba arruinado. Lloré y lloré hasta que no quedaron lágrimas y caí profundamente dormido.

 Lloré y lloré hasta que no quedaron lágrimas y caí profundamente dormido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
MariposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora