Capítulo 1

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“Sea bienvenido a Fairy Luck, donde haremos sus sueños realidad”

Lema de Fairy Luck - Michelle Smith

Michelle Smith

Hace mucho tiempo que no os escribo 

Mucho tiempo hace que abandoné Brinchexter, la herrería, en esta extraña desventura a través de las tierras de Gran Britania hacia tierras mágicas, siguiendo la senda de los dioses.

Casi ha pasado ya un año entero desde que no nos vemos, y meses hacen ya de la caída del monstruo Rin, que estuvo a punto de consumir nuestro mundo.

Seguimos huyendo, escondiéndonos.

Krähennest, el reino élfico, sigue considerándonos criminales; da igual que fuese gracias a nosotros que el mundo siguiese tal y como hasta ahora.

En ocasiones, cuando abandonamos un pueblo para ir a otro, en un eterno peregrinaje, me pregunto si dejarán de considerarnos monstruos a los que perseguir, si algún día se valorarán nuestras hazañas.

Mientras tanto, hoy, a 12 de enero de 1772, solo podemos seguir adelante y no mirar atrás.

La misión que me encomendé, la de llegar a la Divina Fuente, tierra mítica de los dioses, sigue en pie; y mi investigación nos ha llevado a seguir la pista del famoso pirata Edward Bonnet, el último gran pirata y, cuya muerte, marcó el fin de la era de oro de la piratería, en 1730.

El gran pirata fue conocido, en su momento, como el Rey del Mar, por sus innumerables hazañas. Todas ellas parecen relacionarse, de un modo u otro, con las habilidades propias de un portador.

En este caso, un portador del mar.

Es la mejor pista que tenemos para encontrar el templo de Araila, la diosa del mar, y así cumplir la prueba que nos abrirá una de las puertas a la Divina Fuente.

El mapa de los dioses deberia guiarnos, sin embargo,  marca todo el mar en su conjunto. Y el mar Titán no es precisamente pequeño, ocupa más de la mitad del planeta, y la falta de un barco complica el asunto.

Nuestro objetivo, ahora mismo, es simple. Tratar de conseguir un barco y zarpar siguiendo la ruta de Edward. Salvo que no tenemos dinero suficiente, ni información suficiente sobre Edward...

En general, estamos perdidos.

Pero no nos rendimos, todavía. Hace unas semanas llegamos a Nest; un pequeño pueblo costero en la costa este de Gran Britania, con apenas noventa habitantes.

Un pueblo de casas viejas y de madera, con caminos de lodo que conectan con un puerto simple. Los cuatro barcos que ahí permanecen, siempre inmóviles,rara vez parten. Sus dueños vuelven con algunos peces enredados entre sus redes cubiertas de algas, aún aleteando. Lo que atrae a los pequeños leones marinos, ¿o eran focas? No sé, casi siempre los confundo. Con sus  extraños ladridos, se arrastran torpemente con su cuerpo y aletas para llamar la atención de los pescadores que puedan ofrecerles un pescado.

El olor al pescado fresco, a la salitre, el barro y el estiercol de los animales compone la mayor parte del compendio de olores del lugar. Un pueblo donde la estructura más importante parecía ser una taberna donde siempre había ajetreo.

Fairy Luck : El Corazón del Mar ||Libro 2||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora