Mientras Valentina junto con Marcela ya habían recién terminado con la familia Villavicencio, se veía como Leo junto con Nando estaban frente a frente contra unos seres oscuros, cada una de esas criaturas tenían ojos totalmente los ojos rojos.
-Debo de admitir, que esto es más de lo que hubiera esperado ver, ¿no crees Chisguete? -pregunto Nando al ver a aquellas criaturas que los estaban mirando con malicia.
En lugar de responder a lo que dijo su hermano mayor, Leo solamente estaba analizando en silencio la situación y, vaya que no se comparaba en nada a la ultima vez.
-¿Que pasa Leo? ¿Acaso las opciones de la nada se te están terminando? -pregunto la Nahuala con clara burla en el tono de voz.
A estas alturas, el muchacho notaba que la criatura no se encontraba físicamente en el lugar, su voz hasta ahora ha sido lo único que había hecho acto de presencia, era como si solo se sintiera por el viento.
Un viento oscuro y malévolo.
Seguía volteando a ver de un lado al otro, notaba que algunas sombras empezaban a alargarse, y luego tomaban vida hasta ser como los otros que el y Nando ya tenían enfrente.
-Estas cosas ya parecen realmente unas criaturas de la noche -dijo Nando quien veía con algo de nervios a aquellas criaturas.
De repente, las palabras de su hermano mayor comenzaron a resonar dentro de la cabeza del ex-cazafantasmas, el que la Nahuala haya creado a aquellos seres a partir de la oscuridad que los asechaba en aquel lugar, solamente hizo que dentro de su ser se quisiera dar un golpe en la cabeza.
-Claro, eso es. -pensó Leo al mismo tiempo en que sacaba algo que estaba dentro del bolsillo de su pantalón.
En ese momento, el castaño se percata de que tanto Valentina como Marcela acababa de deshacerse de los Villavicencio, para luego ver que las dos iban directo hacia ellos.
Eso hacia que pensara que, esta vez la situación podría llegar a estar a su favor.
-Nando, ¿te acuerdas que una dijiste que una bola de fuego es lo mismo que una bola de luz? -pregunto Leo de manera que obtiene la atención del mencionado.
Al mismo tiempo, Valentina y Marcela quienes escucharon lo dicho por el castaño menor, detuvieron de golpe su paso, pero luego vieron como Leo sacaba algo de su bolsillo, y las dos abrieron los ojos al ver exactamente lo que era.
Leo tenia un encendedor en la mano.
-¿Que crees que vaya a hacer? -pregunto Marcela en voz baja mientras pensaba en lo siguiente que podría pasar.
-No lo se pero... -decía Valentina hasta que se detiene rápidamente, sus ojos al mismo tiempo se abren casi como si de platos se trataran, ya sabía lo que estaba por pasar ahora. -Marcel hay que alejarnos... ¡ya! -grito con lo ultimo mientras se llevaba del brazo a la otra chica.
Nando por su parte, ve como su hermano sacaba el encendedor y luego ve como estaba empezando a prender la mecha del mismo, y luego al ver a las seres oscuros fue que sus ojos de igual manera se abrieron al momento.
-Oye, estas loco hermano. -dijo Nando al mismo tiempo en que comenzaba a irse hacia atrás paso a paso.
Leo en cambio, en lugar de responder a las palabras de su hermano mayor, solamente se limita a mantener su atención en lo que estaba haciendo hasta que, al final la chispa del encendedor logra que se llegue a formar una pequeña flama.
-Nando en serio, mejor vete alejando... ya. -termino de decir Leo al mismo tiempo en que su mirada se endurecía al ver a su hermano a los ojos.
Aunque normalmente se ponía a discutir con su hermano menor al respecto, el hecho de ve esa mirada en sus ojos era más que lo que mil palabras pudieran dejar en claro, por lo que poco a poco daba pasos hacia atrás hasta que se empieza a alejar e ir junto a las chicas.
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El Regreso del Charro Negro
FanfictionHan pasado 6 meses después de lo ocurrido con el Charro Negro, y el joven Leo San Juan ha comenzado a acostumbrarse de nuevo a su vida normal, pero aun sigue extrañando a sus amigos fantasmas y a su amada... Xóchitl. Pero todo lo que conoce volverá...