Kim Minji
Mientras sus labios exploran mi boca con sensualidad, rodeo su fina cintura con mis manos acariciándola suavemente. Sin alejarse de mí quita la parte superior de su traje de baño dejándome apreciar su torso totalmente desnudo. Debo decir que tiene unos senos preciosos, no son de gran tamaño, pero tampoco muy pequeño son simplemente perfectos.
Anna toma mis manos y las pone sobre ellos causando que mi atención esté en sus pechos y en sus labios. Las sensaciones que pasan por mi cuerpo son increíblemente explosivas, no quiero que esto termine nunca, todos los días de mi vida venir aquí con ella y desbordar nuestra pasión a los ojos de los pajaritos cantantes y de nadie más. Llevamos varias semanas viniendo al lago a pasar la tarde juntas, aunque la mayoría de veces a sido con los demás chicos.
Aún no ha llegado el momento en el que me entregue por completo a ella, ya que sinceramente no me siento muy segura de ello. Toda las cosas horribles que ha sucedido por las acciones que precisamente estoy haciendo ahora puede que me sucedan los actos macabros que les causaron a esas personas, con tan solo recordar a Hyein lo único que se me apetece es huir de todo esto, no volver a llamarla y no volver a verla, pero cuando la veo llegar al puesto de frutas, con abrumadora sensualidad y ternura todo cambia, todos esos temores desaparecen sin dejar rastro.
- Minji... - se aleja - Hagámoslo
- ¿Mm? - digo sin entender su pregunta.
- Quiero tengamos sexo - directa.
Sin dar ningún tipo de respuesta lo único que hago mirarla, enfrentarme a su penetrante sin saber que decir. En realidad no quiero negarme, en serio no quiero hacerlo, pero por más que quiera no puedo.
- Por favor Kim - da un pequeño brinco sobre mí - ¿No me deseas?
- Sí lo hago, pero...
- No, no. No me des peros... - me dice para plantar sus labios de nuevo sobre los míos, con la diferencia que el cariño reina esta vez.
...
Juego con mi chaqueta moviéndola de un lado a otro caminado con tranquilidad hacia a mi casa. Antes de venir aquí me pase por el pueblo y hablé un rato con mi madre sobre como iban las ganancias de hoy y por la felicidad en su rostro y sus comentarios todo ha ido muy bien. Desde que el señor Constanza (nuestra competencia) se fue del pueblo, nos hemos convertido en el puesto más central del pueblo y eso no ha ayudado demasiado.
Lamentablemente mi padre no ha dejado de beber y mucho menos hora que estamos un poco más estables económicamente. Últimamente ya ni se aparece por casa, ni en el trabajo y mucho menos en los campos; lo que ha complicado gran parte de la producción y más hora que nos está yendo mejor, técnicamnete yo soy la unica allí y con una ayuda tan escasa me preocupa terminar muy mal por ello. Mi madre tiene pensado contratar a alguien y realmente espero que lo haga, por qué sino moriré de cansancio.
Al entrar a casa dejo las llaves en la mesa de la cocina, subo a mi habitación y me tiro a mi cama para así dormir y descansar un poco. Luego adormecida siento como unos abrazos rodean firmemente mi cintura.
- ¿Que hiciste hoy? - ¿Hanni?
- ¿En qué momento entraste? - le pregunto separándome de sus brazos para mirarla.
- Ví que estabas en el pueblo y supuse que vendrías aquí. Quería sorprenderte
- Jajaja tienes que dejar de hacer eso, si algún día me matas tus sorpresas no valdrán para nada - digo en un tono gracioso.
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Forbidden feelings [Bbangsaz]
RomanceVerán como la vida de cuatro chicas pueblerinas podría caer en un profundo vacío, si no buscan la manera de escapar. Pareja secundaria: Daerin. - Completamente mía. - Solo es ficción. - Contenido vulgar&sexual.