Todos nos fuimos a la barra casi de inmediato. Pedimos cervezas y brindamos por la despedida de soltero de Cosmo, depuse de todo, todo eso era por el. Luego decidimos ir a bailar. Todos gritábamos, cantábamos y sobre todo bailábamos. Me di la vuelta y Sodo se pego a mi pude sentir el gentil choque de su miembro contra mi trasero. Le comencé a bailar sensualmente, tire mi torso hacia abajo así dejando solo mi trasero en contacto con Per, comencé a moverlo de arriba a abajo y de un lado para otro lentamente. Con cada roce podía notar como el ambiente se iba calentando mas y mas. Sodo me dio la vuelta y me tomo suavemente por el cuello, sabia que era mi fetiche favorito. Atrapo mis brillosos labios en un apasionado beso lleno de deseo y lujuria. Sus manos comenzaron a explorar mas y mas mi cuerpo. Lamentablemente Tobías nos interrumpió. El estaba tan borracho como nosotros pero aun así seguía razonando como persona normal.
—Hey, chicos. Por favor tengan mas cuidado, puede que allá gente que los reconozca. Solo cuídense ¿okey? no quiero que se metan en polémicas y esas cosas, ahora no, en serio.— Nos disculpamos y Tobías nos abrazo luego seguimos disfrutando y bailando. Esta vez con todo el grupo.
En el medio de la gigantesca disco había un cubo, ahí la gente que se atrevía podía subirse a bailar. Yo quise ir, Randy y Jutty fueron los únicos que se atrevieron a acompañarme. Los tres nos subimos y empezamos a bailar, mire a Sodo, estaba abajo con una cerveza en la mano mientras me miraba riendo. Comencé a bailarle, mientras hacia esto vi como cinco personas con gigantes trajes de robots entraban. Tenían lasers en todo su cuerpo y con una maquina tiraban alcohol por sus manos.
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De inmediato dos se acercaron al cubo, uno me tomo por la cintura y comenzó a bailarme. Yo a este punto estaba bastante borracha por lo que no me daba cuenta de lo que hacia. Baile con el, Randy se dio cuenta pero estaba muy borracho por lo que solo rio y se sumo a nosotros. los tres estábamos bailando demasiado pegados. Mientras reía el tipo del traje me tomo del rostro y me dio un beso, al principio me costo procesarlo pero cuando me di cuenta le peque una fuerte cachetada y lo aleje de mi. Voltee mi cabeza buscando a Sodo entre toda la multitud. De pronto lo encontré, me estaba mirando fijamente y no tenia la mas mínima expresión en su rostro. De inmediato me di cuenta de lo que había hecho, Sodo se fue y lo salí persiguiendo.
—¡Per! ¡Per espérame!.— Lo tome del brazo.
—¿Que quieres Cata? ¿no te basto con besar a ese tipo como si yo no estuviera?—
—Sodo, perdóname, en serio, no quería hacer eso, pero tu lo viste, el me agarro. Per...— Per me quedo mirando a los ojos. Solo asintió. Sodo sabia que yo no era capaz de hacer eso.
—Después hablamos, ahora solo quiero estas con Cos, no arruinemos su despedida de soltero por tonteras como estas.— Asentí y fuimos adentro.
Esta vez decidí solo quedarme en la barra y beber un vaso de agua, no quería seguir arruinando mas las cosas. Per estaba a unos cuantos metros hablando con Cos y Chris, pude notar como de vez en cuando miraba con desprecio al tipo y a Randy por lo que habían hecho. Esto me causo pena ya que no quería que Sodo se enojara con Randy solo por bailar.
—Que paso Cata, porque ya no estas bailando ni...bebiendo.— Dijo Tobías sentándose el lado mio.
—No es nada Tobi wan.— Tobías me quedo mirando.
—A ti te pasa algo, Catita a mi no me engañas, solo mírate, estas bebiendo agua.— Los dos reímos. Al final solo le dije que tuve una pequeñas discusión con Per, no quería contarle todo ya que no quería arruinar la diversión. De vez en cuando cruzaba miradas con Per, sus miradas reflejaban algo de enojo y decepción, esto solo me ponía mas triste. Tobías me invito a bailar y yo acepte, solo quería distraerme un poco.
Luego de que la fiesta terminara nos fuimos, los chicos se quedaron en mi departamento a dormir ya que era grande pero no habían suficientes camas para todos por lo que me tuve que ir con Sodo a su departamento. En el camino hacia el departamento no cruzamos ni una sola palabra. Al llegar decidí tomar un baño, después de salir del baño me puse una delgada bata negra. Me estaba peinando mi húmedo cabello y Sodo se quedo leyendo un libro.
—Sodo— Un silencio adorno la habitación,
—Vamos Sodo, no me ignores.— Sodo seguía con sus ojos clavados en las pequeñas letras de tinta plasmadas en su libro.
—¡Per!— Sodo lamio su dedo y dio vuelta la pagina.
—Ok, es todo. Si me quieres seguir ignorando, esta bien, no te juzgo. Pero acuérdate de mi Per...te hare hablar. Me metí debajo de las suaves sabanas blancas. Llegue hasta sus piernas y le baje su calzoncillo. Pude sentir la cara de sorpresa de Sodo detrás de su libro. Le separe sus piernas y agarre su dormido miembro. En instantes me lo metí a la boca, comencé a succionar delicadamente su glande, jugué y consentí su frenillo. Luego comencé a masturbarlo con mi mano mientras con mi boca succionaba sus suaves y bien rasurados testículos. Podía escuchar las quejas de Sodo, sus largo y temblorosa suspiros y alguno que otro cálido gemido. Lamí su longitud de abajo hasta arriba y deposite un tierno beso en la punta.
Cuando Per estaba por venirse retiro las sabanas y me levanto bruscamente del brazo, así dejando mi cuerpo entre sus bien abiertas piernas y mi rostro casi pegado al suyo.
—Ya basta C, no creas que así se soluciona todo.— Se paro y se sentó a los pies de la cama dándome la espalda. Yo me quede arrodillada en la cama.
—Cata, la verdad odio los celos, al igual que tu, y lo sabes. Pero honestamente si me dolió que bailaras de esa forma con ese tipo que ni conocías y con Randy, que es mi amigo, y ademas de que el tipo te beso sin descaro.— Aunque Sodo no me estaba viendo aparte la mirada mirando hacia abajo, me daba mucha pena hacer sentir mal a Sodo. Estaba abriendo mis labios para decirle a Sodo cuanto lo sentía pero Sodo rápidamente hablo.
—Quítate la bata.— Demando con voz grave. Quedé sorprendida por un momento pero luego actúe, de inmediato le hice caso, me quite la bata y me quede completamente desnuda. Sodo se dio la vuelta y me miro, se paro y se dirigió a mi lado de la cama. Allí parado con su pene desnudo y aun erecto, me observo con una mirada llena de lujuria.
—¿Te gusto besar a ese chico? ¿lo hizo bien? porque por lo que vi realmente fue un asco. Si es así de malo besando imagina lo malo que sera en la cama. En cambio yo...ahora veras a lo ese imbécil se enfrentaba, cariño. Te daré tanto placer que nunca mas se te va a cruzar por la cabeza besar o bailar con otro chico que no sea yo, te hare gemir mi nombre tan fuerte, que todos lo escucharan y sabrán que eres mía y solo mía. Tendré que castigarte por ser una chica mala.—
