Capítulo 21.- Ganadores.

2.3K 145 10
                                    

Canción en multimedia, reproducir.

Por fin había llegado la gran final, el América estaba en la final.

Me sentía emocionada, mi cuñado Edson era canterano, mis amigos de toda la vida me involucraron mucho el americanismo, pero siempre decía que Chivas era mi equipo, por dar la contraria.

Kevin y yo no habíamos estado juntos estos últimos días, él se la pasaba viajando.

Pero me tocaba hacer mi papel de novia en este día, me coloque una playera térmica debajo de la playera del equipo.

"K. Álvarez" vi antes de ponérmela.

Esta farsa me estaba sobrellevando, me sentía mal, ya no era coraje lo que sentía con Kevin, estaba pensando si perdía todo el dinero que estaba de por medio y dejaba todo por la paz, Kevin no hacía fácil las cosas, entendía que yo tampoco hacía mucho.

Llegue al estadio azteca, entré por la entrada especial de jugadores y familiares.

A pesar de que iba más de compromiso que voluntariamente, estar escuchando a la afición, me llenaba de alegría, adrenalina, era algo inexplicable lo que se estaba viviendo en el azteca.

Entramos las familias a los vestidores, Jardine nos había pedido que fuéramos a darles ánimos.

Salude a las chicas, esposas y novias de los jugadores, también a sus hijos, para después saludar a los chicos.

-Mucho éxito Luis.- abrace a Malagon.

-Gracias Nati.- dijo sonriente.

-En ti confiamos.- lo señale.

-No ayudas en nada.- reclamo.

-¡Nati!.- gritó Emilio.

-Hola Emi, te veo emocionado.- dije sonriente, me alegraba verlo así.

-Lo estoy, el equipo de mis amores.- beso el escudo de su playera, Emilio era muy esporádico.

Busqué a Kevin con la mirada, algo le estaba indicando Brian, Kevin asentía, hasta que volteo a verme, por un segundo nuestras miradas conectaron, sentí una punzada en el estómago, esto cada día era más complicado.

Kevin comenzó a acercarse a mi.

-Hola ¿listo?.- pregunté pareciendo lo más normal posible.

-Si, nervioso.- dijo sonriente.- Pero emocionado.

-Trabajaron mucho por llegar hasta acá.- él asintió.

-¿Qué hacemos? ¿Un beso o qué?.- dijo susurrando, esos actos de "cariño" no dejarían de ser incómodos.

-Un abrazo es suficiente.- el asintió y se acercó a abrazarme.

-¡Vamos chicos! ¡Ya es hora!.- gritó Jardine.

-Mucho éxito.- dije después de separarnos del abrazo.- Ya me voy, al rato te veo con el trofeo.

El sonrío.

Antes de separarnos por completo, se agachó a darme un beso de pico.

-Gracias.- dijo muy cerca de mis labios.

Asentí.

Antes de que todas las familias nos saliéramos, nos tomaron unas fotos, con todos los jugadores, esposas, novias e hijos.

(...)

Narra Kevin

El último año había sido tan caótico, me mudé a Ciudad de México, me reclutó el Club América, me desvié un poco de mi carrera, que terminó en un contrato de una relación amorosa por un año.

Nuestro contrato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora