𝐂apitulo 𝐎nce.

1.7K 209 18
                                    

Bakugou jadeo en cuanto Izuku empezó a lamer sus pezones, se sentía exquisito.

Izuku quitó toda prenda del cuerpo del rubio, para así, apreciar lo bien formado que estaba.

Notó un poco, el busto que tenía, osea, su pecho estaba algo grande para ser de un hombre, pero no le importo, volteo su cuerpo y se dirigió a su trasero.

Katsuki tembló un poco, se estaba sintiendo muy bien.

Deku metió su lengua dentro de Katsuki, moviendolo de formas indescriptibles para el rubio.

Sentía que se vendría solo con la lengua de Izuku.

Paso un rato desde que Izuku lame y mete sus dedos dentro, lo disfruto mucho, pero cuando estaba por venirse, Izuku saco su lengua.

Katsuki iba a protestar en señal de disgustado, hasta sentir algo más grande y palpitante en su entrada, estaba acariciándolo.

Era el pene de Izuku, que se encontraba duro por exitación, jadeo ante aquella sensación suave de ser casi sometido.

Con sus propios dedos, abrió la entrada, con sus ojos medios llorosos y con su cuerpo sudoroso.

Esa noche, se entregaría como el siempre quiso a Izuku.

Deku no pudo más, entro de una estocada en Kacchan, cosa que jadeo fuertemente por la gran presión de ser invadido por alguien nuevo.

Se sentía a morir, su entrada ardía, le picaba, le dolía un carajo, pero levemente le parecía placentero.

Y no era el único que disfrutarlo.

Pudo ver cómo Izuku tenía el entrecejo arrugado, sabía que tal parece, su entrada era estrecha para moverse.

Pero Deku no pudo esperar, y empezo a embestir fuertemente a Katsuki.

Lo saco de sus casillas al sentir la presión de el glande golpeando un lugar glorioso, golpeaba sin parar su próstata.

Gemía sin control alguno, Izuku cada vez se movía más rápido, mientras besaba su cuerpo sudoroso y dejaba mordidas en señal de propiedad.

Izuku tenía una muy buena resistencia.

Por fin Katsuki se sentía mejor.

[ ... ]

El tercer orgasmo se formó en el vientre de Izuku, quería terminar nuevamente en Katsuki.

Joder, sentía que el rubio se comía si verga en casa oportunidad, más se tragaba su semen.

Fue muy excitante ver con sus propios ojos, como la entrada se contraía por los espasmos.

Hubieran seguido y formado otro orgasmo, de no ser que llamaron a la puerta, era Kirishima.

Katsuki arrastró a Deku hasta la puerta, hizo una señal de silencio y empiezo a lamer y chupar su pene.

Deku jadeo levemente la sensación intensa.

—¿Ki...Kirishima-Kun?—Dijo asomándose un poco a la puerta, así que no lo viniera desnudo y con un compañero.

—Lo siento bro, ¿Katsuki está contigo? Lo busco desde hace un buen rato.—Pregunto.

—N..no, estoy aquí tomando un baño a solas...si no te importa.—Jadeo levemente, no quería que kirishima se enterará, pero la sensación que Katsuki provocaba era intensa.

El lamió y mordía levemente su pene como si fuera un maldito dulce.

—Lo siento kirishima-kun...pero estoy ocupado.—cerro la puerta en su cara.

Kirishima quedó confundido, pero no le dió importancia, lo dejo pasar y se fue.

Deku separó su miembro con la boca de Katsuki, lo cargo y lo lanzo a la cama.

Katsuki estaba arriesgando el momento con hacerle eso.

Sonrio morbosamente al rubio, agarrando sus firmes piernas y colocándolas sobre sus hombros.

Katsuki tembló, Izuku se veía aún más sexy cuando estaba asi.

En un rapido movimiento, Izuku volvió a penetrarlo con brutalidad, siendo un intruso en la entrada anal del rubio.

Jadeo mucho tiempo, sentía que volvía a formarse en su vientre el orgasmo.

Antes de eso, Izuku lo beso sin miramientos.

Correspondió hambriento de Izuku.

Después de tanto tiempo, lo estaba haciendo con Deku, se sentía feliz.

Unas cuentas estocadas más a su próstata, e Izuku volvió a venirse, y katsuki derramó su semen sobre el vientre del peli verde y en el.

Cuando su beso termino, se volvieron a mirar, sabían que no era suficiente.

Volvieron a besarse con aún más lujuria, necesitaban más del otro.

[ ... ]

—Camie, querida, de seguro solo están discutiendo o nose...pero no te preocupes tanto.

—Eso fue hace horas...y no aparece...¿Se habrá enojado?

Yaoyorozu la estaba apoyando como podía, pero las lágrimas de Camie parecían no tener un fin.

—Bakugou-Kun es así, así que debes esperarlo o dormir, de seguro viene temprano.—Sonrio.

Camie estaba preocupada, hace bastante tiempo que Katsuki no estaba junto a ella.

Pensó que lo había arruinado todo.

[ ... ]

—¡Izuku! ¡Izuku! ¡AHH! ¡AHHGGG~!—Llego otro orgasmo.

Deku parecía no cansarse de profanarlo, se veía cada vez más exitado con su culo.

Se excitó al saber que ya tenía varias marcas sobre su piel, en su pecho, trasero, cuello, y algunas cuantas palmas de las manos de Izuku que estaban rojas por unas duras nalgadas.

Izuku era glorioso.

—Te amo.—Dijo Deku cuando se volvió a correr dentro.

Katsuki perdió la cuenta de cuántas veces llevaba ya dentro y corriendose sin parar, sin duda, llevaban bastante tiempo.

El rubio diría algo por lo dicho de Izuku, pero este mismo lo callo con otro beso cegador, que lo dejo nuevamente mareado.

Sin duda alguna, Izuku era muy buena en el sexo.

[ ... ]

El día se hizo, los rayos del sol despertaron a un adolorido rubio, quien se encontraba de espaldas, siendo abrazado por Izuku.

Recordó todo lo de anoche, desde la confesión, los besos y el sexo.

Un evidente sonrojo se apareció en sus mejillas, no podía creer lo que hizo.

Aunque, se alegraba en el fondo, Izuku era muy cálido al estar dormido, y sin duda, fue una noche ardiente para ambos, sentía que tenía oportunidades de por fin terminar su matrimonio.

—¿Kacchan...?—Dijo un medio dormido peli verde.

—Lo hiciste...¿Que te hizo hacerlo?—Hablo directamente el rubio.

—Me canse de todo, ya no quiero nada con Ochaco...no la soporto más tiempo, ahora te amo a ti...ella ya no significa nada para mí.

—¿Cómo puedo estar seguro?—Pregunto con desconfianza.

—Te hize el amor y no me fui en la mañana como haría cualquier persona que solo buscaba sexo..

Katsuki analizó esa respuesta, y no podía negarse, si Izuku se hubiera arrepentido, muy seguro que le hubiera dejado una nota y se hubiera ido temprano, dejandolo ahí solo.

Pero no, estaba a su lado, abrazando su cintura sin culpa alguna, cosa que fue una excelente respuesta.

𝐈𝐍𝐅𝐈𝐃𝐄𝐋𝐈𝐃𝐀𝐃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora