ERES MI DESTINO / Todobaku

3.

"Tener que abrir puertas, las cuales había cerrado anteriormente, durante mucho tiempo. solo para que esa persona especial, lo viera como un persona diferente, no como un extra más"

-solo preséntate.. yo hablo personalmente con él después- el cenizo no sabia a que persona se refería, pero con el tono de voz que había puesto el bicolor, dedujo que no le caía bien.

-no es broma verdad bastado mitad y mitad- aun seguía sin creer lo que el menor hablaba.

-¡claro que no!- exclamó este mirándolo con seriedad -puedo darte mi número si pasa algo- añadió a lo último. El rubio la verdad no se veía muy convencido sabía que era una empresa grande, mayormente reconocida.

-Bien, nada más si es mentira te juro que soy capaz de matarte- dijo este dándole una mirada amenazante, mientras le tendía su celular. lo único que hizo el bicolor fue ocultar su leve sonrisa y tomar el celular, dígito su número dejando el nombre vacío, para que fuera el rubio que lo escogira.

Cuando se detuvo el tren. no habían hablado nada más, ya que el bicolor parecía sumergido un sus pensamientos, mientras que era observado de reojo por el rubio,

-lo siento, no voy a poder acompañarte tengo que arreglar algunas cosas- dijo este con la cabeza gacha.

-tsk como sea- chisto para bajarse y dejar a tras al bicolor.

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-shoto- lo llamó su progenitor como por décimas vez.

- ya me vas a decir, ¿donde carajos te metes después de las clase?- estaban reunidos en una gran oficina perteneciente a su padre, el cual no para de exigir respuesta a su pregunta -habla de una buena vez, fue un trato- bien dicho era un trato que había hecho con él, ya no haría más cosas a escondidas de él. Pero en verdad no quería hablarle de katsuki, él no era de mentir.

-eh.... encontrado a mi destinado- fue lo único que dijo, la verdad no quería explicar más nada pero estaba seguro que su progenitor no se iba quedar con eso.

-Asi que es eso ¿por fin vas aceptar la empresa?- fue lo que dijo su progenitor le sorprendió que no preguntara más del caso eso era raro.

-si lo haré ¿acaso no fue ese el trato de hace ya años?- ciertamente hace años había hecho un trato el cual marcaría para todo su vida con respecto a katsuki.

-Veo que te esta haciendo bien estar con tu destinado nuevamente- le dijo su progenitor con una sonrisa en su rostro, algo irreal por cierto.

El bicolor todo lo que hacía, era porque quería pasar más tiempo con katsuki y como lo conseguía siendo el mejor.

-dime shouto vendrá mañana, ya hace años que no lo veo, despues de eso..- dijo su progenitor, sacando una mueca por parte del bicolor, ya que hizo a este recodar el pasado.

-si, solo promete que se lo darás- dijo shouto a su padre algo amenazador

-si es bueno en lo que hace, el puesto es todo suyo- dijo su progenitor encoguiendose los hombros.

-iras a visitar a tu madre- dijo cambiando del tema el mayor.

-lo haré- la verdad no había nada mal en su familia, solo que los hijos era presionados desde pequeños hacer los mejores en su clase, además de que el patriarca de la familia casi obligará a su esposa tener más hijos por propio gusto hasta que la madre estalló, en esta el pequeño shouto se encontraba hay llevándose todo el daño y una marca que llevará hasta el día en que se muera, la cual también recordaba el día en que se suicidó su hermano mayor tuoya, todo por la presión que su padre ejercía en el, pues de esa manera lo veía shoto.
Aunque parte de esta historia le falta un pedazo, que cambia todo.