El amor se vuelve peligroso cuando te enamoras de la persona que más te odia, porque tus sentimientos quedan expuestos a su completa manipulación. La línea que divide al amor y el odio es bastante estrecha, y nuestras protagonistas danzan sobre ella...
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Martes 19 de Abril, 2016 (tarde)
Al terminar las clases, ambas se dirigieron al supermercado más cercano de la casa de Adora para comprar una bebida y algunas golosinas para pasar la tarde.
Ahora venían caminando por un barrio que Catra no conocía bien, pues estaba en dirección opuesta al suyo. Habían muchas casas grandes, algunas antiguas y otras modernas, pero todas elegantes. Se detuvieron frente a una gran casa moderna y pintada de blanco.
- ¿Puedes sostener las bolsas para buscar mis llaves?
Catra sólo asintió y sostuvo las bolsas con sus ojos bien abiertos, sorprendida de que Adora fuera una niñita rica que vivía en este vecindario.
La rubia revolvió torpemente su mochila hasta encontrar las llaves, y cuando las puso en la cerradura de la cerca frontal, se dio cuenta de que no estaba cerrada.
- Que raro. -Frunció un poco el ceño, pensando.- Tal vez olvidaron cerrar con llave cuando salieron a trabajar.
La chica le abrió la puerta de la cerca a su invitada especial para que pasara primero y cerró detrás de ella. Cuando puso la llave en la puerta principal, se encontró con la misma sorpresa: tampoco estaba cerrada con llave.
Le parecía muy extraño que la puerta principal estuviera abierta, debido a que Hope siempre era muy cuidadosa y nada se le escapaba. Finalmente ambas entraron y se dieron cuenta de lo que pasaba.
- ¡Feliz cumpleaños Adora!
Gritó la multitud que esperaba ansiosa su llegada. La música comenzó a sonar al igual que las múltiples voces sonando alrededor de la rubia.
- ¡¿Qué?! -Exclamó emocionada viendo a todos sus amigos y compañeros ahí, incluyendo a Bow, el cual se acercó.- ¿Una fiesta sorpresa? -Estaba tan emocionada como una niña pequeña.- Bow, no debiste. -Lo abrazó y besó su mejilla mientras veía todos los globos y decoración.-
- No podía dejar que pasaras tu cumpleaños número 16 sin hacer una buena fiesta.
- ¿Cómo lo hiciste? -Llevó una mano a su cabeza, preocupada.- ¿Mis madres saben de esto?
- Duh, ¿Quienes crees que me dieron las llaves? -Se las mostró y las guardó en su bolsillo.- Confían en que yo cuidaré su casa y a su hija, así que no llegarán hasta más tarde.
- Eres el mejor. -Sonrió agradecida por todo lo que hizo.-
Catra, quien al ver a toda esa gente metida en la casa de Adora, se congeló justo frente a la puerta dejando caer las bolsas. Ella no estaba preparada para algo así, pensó que sólo serían ella y Adora compartiendo comida, escuchando música y viendo algunas películas, no que se vería metida en medio de una fiesta con todas las personas a quienes no le agradaba.
