El amor se vuelve peligroso cuando te enamoras de la persona que más te odia, porque tus sentimientos quedan expuestos a su completa manipulación. La línea que divide al amor y el odio es bastante estrecha, y nuestras protagonistas danzan sobre ella...
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Miércoles 2 de Diciembre, 2015 (noche)
Mara se dirigía a la última reunión de padres y maestros del primer año de preparatoria de su hija. Esta vez Hope no pudo acompañarla porque tenía mucho trabajo. No le gustaba venir sola, pero al menos sabía que George y Lance estarían ahí.
Mientras la reunión se llevaba a cabo, Adora y Bow se habían quedado hasta tarde en la escuela, así que decidieron esperar a sus padres para irse con ellos, mientras charlaban y jugaban.
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- (Ugh, menos mal ya terminó) -Mara se comenzó a levantar de su asiento al igual que los otros apoderados.- (Con algo de suerte, no tendremos que ver a este maestro nunca más.)
- Señorita Griffin, ¿Podría quedarse un momento? -Tenía sus manos detrás en su espalda.- Quiero hablarle sobre Adora. -Casi todos los padres ya habían salido.-
- Es señora, estoy casada. -Dijo con un tono serio una vez que llegó frente al hombre.-
- Como sea. -Hizo un ademán con su mano, ignorando completamente su comentario.- Verá, Adora es una niña muy inteligente aunque no muy sociable. Tiene un excelente rendimiento académico, pero últimamente la he notado más distraída.
- ¿Qué importa ahora? Ya terminaron el año escolar. -Su tono seguía serio, no le agradaba para nada este hombre.-
- Me preocupa porque creo que se debe a que se está acercando demasiado a una compañera suya. -Él mantenía sus brazos cruzados y una expresión seria.- Si sabe a lo que me refiero.
- No, no le estoy entendiendo. -Su expresión aunque seria, demostraba su real confusión.-
- Digo, si usted eligió el camino del pecado para su vida, es su problema. -Se quitó sus lentes para limpiarlos.- Pero es mi responsabilidad como maestro el no permitir que una de mis alumnas arruine su vida también. -Se volvió a poner los lentes.-
- No puedo creer que tengas este nivel de indecencia para referirte a mi y mi esposa. -Dejó su bolso a un lado.- ¡¿Cómo si quiera puedes ser maestro?!
