[Verano]

«6»

¿Qué sucedió? ¿Dónde estoy?

— ¡Jacob! Aún no me respondes.- escuché decir.

Una chica.

El contenedor, la mujer de la mansión, Jacob, el dolor punzante en mi brazo.

Ayuda.

— Está despertando, ya cállate.- habló la voz masculina.- ¿Leslie? ¿Leslie estás bien?

Abrí mis ojos con pesadez, toqué mi cara mis mejillas estaban empapadas.

— ¿Qué me pasó?- pregunté tomando asiento.

— Te desmayaste y te trajimos a nuestra casa.- respondió la chica a mi lado.- Soy Milán, lamento que de está manera nos conociéramos.

— Leslie, me llamo Leslie.- dije cerrando mis ojos con fuerza, la cara de esa criatura apareció en mi mente.- ¿Cuánto...?

— 3 horas,- respondió Jacob. Observé mi brazo envuelto en una venda.- estabas sangrando mi hermana te ayudo.

— Gracias.- dije y traté de ponerme de pié, pero una punzada en mi cabeza me hizo tambalear.

— Oye, es mejor que sigas recostada.- Jacob me tomó del brazo y me hizo sentar.

— Necesito irme, tengo que volver a mi casa, me esperan allá.- dije mirando el suelo.

— Llamaré a alguien para que venga por ti.- dijo y busco mi bolso. Saqué mi teléfono y lo desbloqueé.- ¿A quién llamo?

— Mi prima, a ella.- dije y él asintió.

— Ahora que estás bien me puedes decir ¿Qué fue lo que sucedió en ese callejón? ¿Qué era eso?- preguntó nerviosa la chica.

— Milán déjala.- ordenó Jacob.

— No lo sé, solo recuerdo haber escuchado a alguien llorar y me acerqué a ese contenedor, y lo vi no sé que era o quién era.- dije y ella comenzó a morderse una de sus uñas.

— Diablos, ¿Ya estará por acabarse el mundo? ¿Ya vienen los demonios?- empezó a hacer muchas preguntas.

— Basta.- dijo Jacob y ella se levantó y salió de la habitación.- No me atiende, ¿A quién más llamo?

No podía llamar a mamá ya que uno no estaba aquí y dos me mataría donde un extraño le hablase para decirle si me puede venir a buscar.

Pero una idea llego a mi mente, mejor dicho una persona.

— Busca a Alex por favor.- dije y éste asintió.

No preste tanta atención si contestó o no, ya que me había vuelto a quedar dormida.

[...]

        Narra Alex

Mi día no fue uno de los mejores.

Ninguna de las chicas estaba en casa, así que estaba recostado en la zona de la piscina techada.

Habían pasado horas desde que Leslie se fue.

— Joven ¿Le gustaría un poco de limonada?- preguntó George desde la entrada.

— Si por favor.- él me dejó un vaso y rápidamente salió.- ¿Qué puedo hacer?

Busque mi teléfono y le escribí a algunos de mis amigos, nadie me respondió.

— Traidores.- dije y entré a Instagram.

Estuve distraído por otra hora más, hasta que mi teléfono vibro un mensaje había llegado.

Ginger