Capítulo 9

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Damián había decidido repasar su próximo examen en la biblioteca antes de empezar las clases. No lo llevaba realmente mal, pero prefería repasar a estar tranquilo en el jardín, donde Gabriel y Ben pudieran encontrarle con facilidad.

Había pasado la noche inquieto, el recuerdo de Rash salvándole por la mañana le hacía sentir que debía de agradecérselo de alguna manera, pero sabía que si iba a hablarle directamente seguramente sería rechazado. No por algo le había dicho que no le dijera a nadie que se habían visto... Por eso y porque técnicamente sus reinos eran enemigos.

Suspiró tras darse cuenta de que no estaba entendiendo nada de lo que estaba leyendo.

Cansado de malgastar energías, cerró el libro y decidió irse a la taquilla, encontraría alguna manera de alargar el tiempo hasta la hora de entrar a clase, quizás buscando a Blake y preguntándole sobre su decisión de leer su leyenda.

Iba caminando como siempre en su mundillo, sin darse cuenta de la realidad, hasta que se chocó de frente contra la espalda de alguien. Avergonzado dio un paso hacia atrás.

- ¡Perdón! Perdón, no iba mirando por donde caminaba y... - Sus mejillas se pusieron más rojas al ver cómo Rash se giraba lentamente para descubrir quién se había chocado contra él. El heredero al trono oscuro le miraba arqueando una de sus cejas, seguramente veía a Damián como un ratón indefenso- ¡Rash, l-lo siento! - Juntó lo que pudo sus manos a modo de disculpa aunque era difícil porque intentaba agarrar a la vez el libro.

- No te preocupes.

Con una pasividad increíble para Damián, el heredero al trono oscuro se alejó como si nada, sin estar enfadado, aunque con ese aura sombrío a su alrededor.

Damián tragó saliva. Debía aprovechar ahora o nunca.

- Rash...

Fue a dar un par de golpecitos con el dedo en su espalda, pero no le dio tiempo porque el alfa decidió prestarle atención. Si el pelirrojo no se daba prisa seguramente agotaría la paciencia de Rash.

- S-Solo quería agradecerte por lo de ayer... No me dio tiempo a decirte nada pero de verdad que te lo agradezco - Damián se sonrojaba según iba hablando. Por supuesto que no miraba a la cara a Rash, la vergüenza le consumía.

El omega no vio que Rash miró a su alrededor antes de hablar. Si alguien se enteraba de que eran cercanos se meterían en problemas así que quería ser previsor. Por suerte parecía que todos tenían algo mejor que hacer así que por fin hizo caso a Damián.

- Te molestan desde hace bastante tiempo ¿Verdad? No os vi hasta ayer, pero siempre he escuchado los rumores.

Su voz era suave y serena pese a la seriedad del chico, hacía que el corazón de Damián latiese ligeramente más rápido.

- Si... Hace años que me persiguen...

El pelirrojo no quería reconocerlo tan rápido, pero era inútil si mentía a Rash, el cual parecía suspirar dolido, o más bien decepcionado por el comportamiento de sus compañeros.

- La próxima vez utiliza hojas de moreras para contraatacar. Gabriel es alérgico y seguro que se aleja en cuanto las vea.

Los ojos de Damián brillaron. Por primera vez en mucho tiempo descubría un punto débil de sus enemigos.

- Rash... ¿Por qué eres tan temido? No entiendo cómo... Pueden decir cosas tan horribles de ti. Si me has salvado es porque los rumores no son ciertos.

El omega tenía tanta determinación en su mirada que enternecería a cualquiera. Rash solo expresó una ligera sonrisa.

- Porque los inventores de esos rumores me han visto más veces que tú.

Corazón de PríncipeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora