🎭 ᝄ︎ 𝐊𝐀𝐙𝐔𝐒𝐂𝐀𝐑𝐀
Después de una noticia que le llega cómo un baldado de agua fría, Scaramouche siente que su vida se cae a pedazos cada vez más. Está acorralado por sus problemas y ya no sabe qué hacer, ¿podrá procesar todo lo que se le vien...
Ooh, don't you find it strange? Only thing we share is one last name Did I beat you at your own game? Typical of me to put us all to shame
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Por la tarde, Scaramouche fue a comprar algunas cosas que le pidió Childe. A regañadientes tuvo que ir, ya que no le quedó de otra, al menos el chico le estaba dando un techo dónde quedarse mientras la situación con Ei se relajaba.
Mientras se preguntaba si llevar leche descremada o semiescremada, su teléfono empezó a vibrar y el tono empezó con un: "Hola, chicos. Yo soy del clan de Mamasita".
Scaramouche se asustó, y mientras intentaba sacar su teléfono, las demás personas lo veían con caras extrañas y otras se reían detrás de él.
El tono siguió con un: "Los hackers van a volver, ya que se enojaron todos porque...". Scaramouche maldijo con todas las maldiciones del mundo el día en que le dio a Childe la contraseña de su teléfono.
Cuando por fin pudo sacar su teléfono, ya había quedado como: "El chico Mamasita" frente a todos los que habían escuchado su tono. Mandó a todos al carajo y revisó su teléfono para llevarse la sorpresa de que era Yae Miko quien lo llamaba.
Su madre no era de llamarlo, a menos de que estuviera a punto de lanzarse de un décimo piso o de pelearse con una jauría de perros rabiosos. Rápidamente, contestó y se puso el teléfono cerca del oído.
—¿Pasa algo? —Preguntó directamente Scaramouche.
No es que quisiera ser grosero, solo que no era usual que eso sucediera; además, tampoco estaba acostumbrado a ser amoroso con su madre, por lo que no veía como algo malo ser así de seco y directo con ella.
—¿Estás bien? ¿Cómo está tu rostro? —Preguntó la mujer desde la otra línea.
—Lo estoy, mi rostro también lo está... —Scaramouche tocó sutilmente el parche que le había puesto Zhongli después de su pelea infantil con Childe—. Me estoy quedando en casa de Ajax...
—Mhm, comprendo... —La mujer se quedó callada por un momento, suspiró y habló nuevamente—. Necesito que regreses a casa mañana, tu madre y yo debemos charlar algo muy importante contigo.
Scaramouche se quedó callado un momento. Estaba pensando en su situación y si debía seguir la orden de su madre; ya que, estaba claro que no quería ver a Ei, pero si su madre lo llamaba y sonaba tan incómoda debía ser por algo importante.
—¿A qué hora? —Preguntó finalmente después de pensar por algunos segundos.
[...]
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Ahora estaba en la puerta frente a "su hogar", el cual no se sentía así; se sentía más cómo un lugar en el cual su opinión, forma de expresión e incluso su propia existencia no valían nada.
