Lo sé, es mi culpa, yo lo provoqué, mi cuerpo tan frágil y pequeño lo provocó; él solo cedió a la tentación, se robó mi alma, se llevó una parte de mi que jamás voy a poder recuperar.
¡No entiendo , pero sé que e mi culpa! Si yo no hubiera sido tan ingenua, si hubiera gritado, si no hubiera callado, tal vez no hubiera tocado todo mi cuerpo, tal vez ahora no me sentiría tan sucia, tan desagradable, tan asquerosa, tan avergonzada.
¡¿Cómo se supone que supere esto?! Yo solo era una niña, no tenía porque haber pasado por eso, siempre me decían que era muy linda, ¿y a dónde me llevó eso?... ¡Maldita sea por qué nací así!
Solo me gustaría saber ¿dónde estaban mis padres?, ¿dónde estaban los que se suponía debían protegerme?, ¿por qué si estaban tan cerca nunca se dieron cuenta?, ¿acaso son ciegos o solo se hacían a los que no veían?, tal vez eso también es mi culpa, por tanto silencio, por no decirles que por favor no me dejaran sola, por no sentir, por no molestar.
Lo que más me molesta de todo es que no hacía nada para detenerlo, yo solo me quedaba quieta, ¡Por Dios, pero ¿qué me pasaba?! Estoy enferma de asco, ya no puedo acercarme a un hombre sin sentir miedo, sin sentirme incomoda, sin sentirme basura; pero tampoco entiendo por qué son los del mismo sexo en los que confío...
¡Que se supone que haga, entro en crisis todo el tiempo, no es lindo, no entiendo que quiere el mundo de mi!
Yo solo... Me gustaría poder olvidar todo, por lo menos así, tal vez, no estaría sufriendo y agonizando por dentro.
ESTÁS LEYENDO
Lo que nunca dije y nunca diré
ŞiirEstos son algunos escritos que se me ocurren de noche. Son algunas cosas que pienso acerca de mi vida. Para quienes se identifican, sepan que no están solos y que muchos pasamos por cosas difíciles que seguramente algún día terminarán... Aunque sé...