Sweet Home 2 [TERMINADA]

⚜Lost⚜

— ¿Puedo saber por qué no me dejaste volver por Hyun?— Cansancio, esa es la palabra que mejor define mi situación ahora. Cansancio por haber corrido tanto con Eun-Hyuk aún cuando todavía no había terminado mi curación. Cansancio porque siempre terminan alejando a los que amo de mi. 

Cansancio porque no dejo de huir. 

— Ya era tarde para él. A menos que quisieses terminar en la misma situación que él, no podía dejarte ahí.

— Esas decisiones las tomo yo sola, Eun-Hyuk. No necesito tu protección. 

— Hasta ahora, parece que ambos nos necesitamos, Pyeon. Tú me cubres la espalda y yo también cubro la tuya. Ahora solo nos tenemos a nosotros, no podemos solo empezar a pelear como imbéciles.

— Lo dice el imbécil.

— Seré un imbécil, pero sobreviví siendo así. Tú no eres tan diferente a mí. 

— No soy como tú, Eun-Hyuk.

— Eso lo puedo poner en duda. 

— Dejando ese tema de lado... ¿Dónde carajos estamos?— Miré a mi alrededor, pero la oscuridad de la noche no me facilitaba la tarea de reconocer el lugar en el que estábamos. 

— No lo sé. En la mañana podremos darnos cuenta de eso. Por ahora, tendremos que buscar un lugar en el cual permanecer hasta que amanezca. 

— No sé tú, cabeza de hongo, pero no tengo intenciones de dormir contigo. Dicho sea de paso, estamos perdidos, ¿Cómo encontrarás un lugar?

— Entonces avanza sola— A mala gana y viendo que Eun-Hyuk no haría caso a mis plegarias o berrinches, empecé a caminar de nuevo a su lado. No había más opción que esperar al amanecer. 

[...............]

Ruido.

Eso fue lo que me despertó. Pero en cuanto abrí los ojos, no encontré a Eun-Hyuk a mi lado.

Me levanté con cautela. Era aire libre, si Eun-Hyuk se había despertado primero, tendría que estar cerca de ahí merodeando. 

Si se lo habían llevado, el terreno que tenía que cubrir sería de mas o menos un radio de 20 metros. ¿Cómo lo sé? La camisa que siempre llevaba puesta encima de su polo aún seguía tibia, por lo cual deduzco que si es la segunda opción, no pudieron habérselo llevado tan lejos. 

Empiezo a avanzar con rapidez pero con sigilo. Si había un monstruo, no quería atraerlo. Si eran soldados, no quería que ataquen. 

De la nada, siento una mano encima de mi boca mientras me jalan hacia atrás, junto con una voz que puedo reconocer como la de Eun-Hyuk y que me indica que guarde silencio. Así, quedamos ocultos tras una pared mientras él alejaba lentamente su mano de mi boca. 

— ¿Qué sucede?— Eun-Hyuk señala una dirección con su dedo y giro mis ojos hacia allá. Se escuchan voces masculinas, pasos pesados. Segundos después, aparecen en mi campo de visión lo que parecen ser soldados de aquel lugar al que Wooi-Myung tanto quería ir. 

— Nos están buscando. Tenemos que irnos— Eun-Hyuk se levanta y empieza avanzar mientras yo sigo observando a aquellos hombres— Pyeon, si te quedas ahí, de nada servirá el haber huido. 

— No tenemos idea de donde estamos ni a donde ir, Eun-Hyuk.

— Yo sí. Vamos— Nuevamente, Eun-Hyuk empezó a caminar. Regresé mi vista hacia aquellos soldados, mas lo único que tuve en frente de mi campo de visión, fue un arma. 

— Te encontré— Ah caray... ¿Me buscaban? De reojo, noté como Eun-Hyuk se daba cuenta de la situación e intentó regresar, mas una seña mía le indicó que no avanzara y se detuvo, observando a la distancia.