Sexto año - No hables del pasado. (42)

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Lo primero que hizo Chenle al día siguiente fue abrir los ojos, siempre despertaba en un lugar diferente cuando no estaba en "casa"... Bueno, en casa de Slytherin, que también era un lugar a donde estuvo desacostumbrado al menos los primeros dos años de sus estudios.

Ahora se sentía orgulloso de ser un Slytherin.

Se levantó de su cama y la puerta se abrió de golpe.

—Levántate, ¡Jaemin no está! —Jisung dijo con una mirada preocupada.

—¿Cómo que no está? ¿A dónde se fue? —Chenle se levantó rápidamente de la cama. —¿Alguna nota?

—Ninguna. —Jisung murmuró. —Puse protecciones, debe estar dentro de la casa, pero no sé en dónde.

—Es tu casa, deberías de saberlo, ¿Hay lugares para esconderse? —Chenle preguntó.

—No es mi casa. —Jisung murmuró. —Es muy diferente a como la recordaba.

—No es tiempo de pensar en el pasado, encontremos a Jaemin.

Chenle ni siquiera se puso ropa decente, seguía con ropa para dormir, Jisung empezó a abrir las puertas, Chenle también iba a ser un hechizo de seguimiento, pero Jaemin sabía bien ocultar su rastro. Fue cuando Jisung tuvo la brillante idea de convertirse en un pequeño hámster y verificar todos los lugares.

Las cosas no parecían fáciles, pero Jisung al fin dio con Jaemin en un ático que ni siquiera sabían que tenían.

—¿Quién está allí? —Jaemin apuntó con su varita cuando escuchó un ruido.

El joven vio pasar al roedor y éste corrió para ponerse frente a él. Luego el ratón se transformó en Jisung, Jaemin quedó maravillado al ver cómo un joven podía volverse algo tan pequeño. Era un buen brujo.

—¿Por dónde entraste? —Jaemin preguntó volviéndose a sentar en el polvoriento suelo. —Protegí la puerta para que nadie pudiera entrar.

—Soy un pequeño hámster, debes proteger toda la habitación, ni siquiera sabía que existía este lugar. —Suspiró. —Todo está sucio y lleno de cosas.

—Me gusta el olor que tiene, me hace recordar tiempos felices. —Jaemin sonrió. —Jisung, sé que ustedes buscan ayudarme, pero a veces simplemente no puedo dormir, no sé si merezco ser ayudado...

Jisung hizo un guiño, suspiró con un tanto de frustración y dejó caer la cabeza.

—Sé que te convertirás en una persona amable, bondadosa y cariñosa, por eso quiero verte convertido en eso. —Jisung mencionó.

—Siento que estoy tan roto que no vale la pena cuidarme, no hay forma en la que yo pueda ser "reparado". —Jaemin dijo.

Jisung se sentó a su lado y colocó su cabeza en el hombro de Jaemin, luego bajó la mirada y le sonrió.

—¿Me permites contarte una historia? —Jisung preguntó, se sentía un poco nostálgico y triste. —Quisiera hablarte de mí.

Jaemin colocó su mejilla acomodada en el cabello de Jisung y sonrió, Jisung no solía hablar mucho del pasado, solía decir cosas bastante maduras para su edad, también era un buen amigo.

—Es lo mínimo que puedo hacer por todo lo que haces por mí. —Jaemin dijo.

Jisung hizo una pausa y no supo por dónde empezar.

—Hubo una mujer hace tiempo, mi "Nanita", o con ese nombre yo le llamaba. —Jisung dijo sonriendo y con cariño. —Ella era una jugadora profesional de Quidditch. —Hizo una pausa. —Yo crecí en el mundo muggle, no conocía la magia, no tenía a nadie que me la enseñara, en el orfanato lo único que deseas es que te adopten...

El heredero elegido (NCT x Harry Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora