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𝙀¹⁵ - "¡𝘽𝙤𝙙𝙖!"

·˚ ༘₊· ͟͟͞͞꒰♘ - 結婚式

El día que tanto habían esperando por fin había llegado. Tzuyu estába en el altar especialmente nerviosa.

A pesar del odio que le tuvo en un principio a la boda no podía negar que todo era muy bello.

El Salon era una cúpula que dejaba expuesto el cielo arriba de ella.

La Familia Minatozaki y el Linaje estaban ahí, todos los miembros presentes y conmocionados.

— No estés nerviosa.— Le susurró su Madre.

Asintió rápidamente tratándose la preocupación que la hacía sentir neviosa.

La música interrumpió sus pensamientos.

Las puertas del salon se abrieron, dos pequeñas niñas aparecieron y comenzaron a dejar pétalos de rosas por el sendero que recorrería la novia.

Tzuyu acomodó su postura, pues la novia apareció.

Sana caminaba radiente con la compañía de su Padre a su lado. Detrás de ellos dos niños que llevaban la cola de la novia.

— M-Maldición...

Susurró para sus adentros y es que ahora la mayor le parecía mucha más bella de lo normal.

Extendió su mano y Sana la tomó con firmeza.

Frente a frente de la persona que más odiaban en el mundo a punto de prometerse en matrimonio, pero ningúna de las dos parecía estar viendo a su enemiga.

Al contrario parecían hipnotizadas la una de la otra, se miraban con firmeza pero a diferencia de las muchas veces que se vieron así, no había más que felicidad y amor en ellas.

El Padre dió inicio a la ceremonia. Pronto el momentos de los votos llego y ambas chicas sostenían una pequeña carta en la que tenían sus votos escritos.

— Queridos amigos y familiares aquí presentes, estámos todos reunidos este día para unir a dos bellas mujeres en sagrado matrimonio.

...

— ¿Zhou Tzuyu recibe usted a esta mujer para ser su esposa, para vivir juntos en sagrado matrimonio, para amarla honrar la, consolarla y cuidarla en salud y enfermedad, guardandole fidelidad, durante el tiempo que duren con vida?

— S-Sí.— Respondió la alta. Con su voz temblorosa.

— ¿Minatozaki Sana recibe usted a esta mujer para ser su esposa, para vivir juntos en sagrado matrimonio, para amarla honrar la, consolarla y cuidarla en salud y enfermedad, guardandole fidelidad, durante el tiempo que duren con vida?

— Sí.— Sonrió la mayor.

— Repita después de mí.— El hombre se dirigió a Tzuyu.

— Yo, Zhou Tzuyu, te recibo a tí Minatozaki Sana para ser mi esposa, para tenerte y protegerte desde hoy en adelante, para bien y para mal, en la riquezay la pobreza, en la salud y enfermedad, para amarte y cuidarte hasta que la muerte nos separe.

— Ahora usted, epita después de mí.

Era el turno de Sana.

— Yo, Minatozaki Sana, te recibo a tí Zhou Tzuyu para ser mi esposa, para tenerte y protegerte desde hoy en adelante, para bien y para mal, en la riquezay la pobreza, en la salud y enfermedad, para amarte y cuidarte hasta que la muerte nos separe.

— Proceda por favor.

Sana tomó el anillo y se acercó a Tzuyu, le sonrió cálidamente y la alta le entregó su mano.