Minha había vuelto a retomar su rutina diaria, un desayuno aceptable, una comida casera hecha por sus manos, un beso dado a su esposo al llegar a casa. Retomó también sus clases después de seis meses que parecieron interminables. Ella y su esposo seguían recibiendo llamadas de sus familias, sabía muy bien lo preocupados que estaban, probablemente siguieran siendo un tema de conversación lastimero y ella no quería eso, así que un día habló con su suegra y le aseguró que todo estaba bien, es lo que necesitaba que ellos entendieran, si ella estaba mal también ellos lo estarían y ya no quería seguir cargando con eso.
Cuando tuvo su primer día de clases después de tantos meses, sus pequeños alumnos la rodearon para un abrazo grupal, los saludó y abrazo de vuelta y en su primer día no dió clases, se sentó en el piso a lado de ellos para que hablaran de todo lo que habían hecho esos meses, estar con sus alumnos le iluminaba el día, lo hacía mejor. Era una mujer fuerte y sabía que sus alumnos eran inteligentes, así que les dió una explicación bastante breve sobre la ausencia de su bebé, nadie dijo nada, más que una pequeña que exclamó: "Yo puedo ser su hija si quiere"
—Yo también —empezaron a decir uno por uno, hasta que todos se ofrecieron.
La inocencia y solidaridad de los niños era algo que siempre le sorprendía, no dudaban en consolar a alguien que estaba triste, cada día aprendía más de ellos.
—Todos ustedes ya son como mis hijos —les aseguró
—Entonces no se sienta triste otra vez —le dijeron
Se levantaron y la abrazaron y aunque no quería llorar, no pudo evitarlo. Cuando pudo llegar a su casa, se recostó en el sofá de la sala y sonrió, había sido un día de progreso.
Seungmin seguía trabajando como siempre, y si todavía seguía de pie había sido por las personas que lo animaban, y ahora mas que nunca porque su esposa estaba bien, los dos estaban bien. Era lunes por la mañana cuando pidieron su presencia en la sala de maestros, llegó y dijeron unas cosas pendientes de siempre, hasta que al final presentaron a una nueva colega, se presentó y la recibieron gustosos. Hasta que pudo retirarse, se dirigió a su salón dispuesto a terminar bien el día.
Hoy Minha tenía un poco de suerte, era uno de esos días en que salía un poco tarde del trabajo y le pidió a su esposo que tomara el transporte para dejarle a ella el auto y pasar a recogerlo, era buena suerte precisamente por eso, porque llegarían a casa juntos, él siempre salía tarde asi que era un buen día para recogerlo. Se dirigió a la escuela secundaria de su esposo, y al llegar aparcó para esperarlo.
Había pasado media hora desde la hora de salida y Seungmin no aparecía por ningún lado, tomó su teléfono y cuando iba a llamar unas personas empezaron a salir, entre los últimos en salir estaba su esposo con una mujer que ella no conocía. Pensó que iría directo a su encuentro pero se quedó parado a platicar con esa mujer, creyó que había visto el auto pero probablemente no se dio cuenta así que decidió llamarle, mientras sonaba la llamada vio a su esposo ver el teléfono y guardarlo en su bolsillo, no le contestó.
¿Por qué no le contestó la llamada? Bajó del auto y fue directo hacia ellos que se encontraban platicando aún en la entrada junto a unas bancas. Mientras se acercaba vio a su esposo sonreír a esa mujer, ¿se atrevía a regalarle su hermosa sonrisa a otra? Y luego ella, ella le sonría pero no era una sonrisa inocente, era una sonrisa y una mirada de coqueteo, ella conocía perfectamente esos gestos. Llegó por detrás y le tapó los ojos, él se asustó y volteo a verla, al reconocerla se sorprendió
—¿Minha, que haces aquí?
—¿Cómo que qué hago aquí? Vine a buscarte ¿quién es ella?
—Oh si, te presento a Rachel, es nueva en la escuela, hoy fue su primer día
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Infieles Minsung/skz family
Roman d'amourHan Jisung conoce a una hermosa pero poco femenina chica. Para Minha este es el primer chico que hace que se quiera sentir sensual; pero todo eso se acaba cuando Jinnie le dice que aquel chico de mejillas grandes es quien tanto le gusta. Y tras años...