Romance universitario

Capítulo 12: ¡Atrapados!

POV BRANDON:

Cuando se fue Sara, volví con mi hermano y le pedí el encendedor. Tomé un cigarro y comencé a fumar. Al rato Dylan me pidió uno. Seguí bailando con mis amigos y no muy lejos de mí, volví a ver al idiota de William.

-No lo soporto-comenté y Dylan me escuchó.

-Oye Brandon, tienes que olvidar todo ese lío entre ustedes- me dice señalando hacia su hermano William- Antes ustedes eran mejores amigos.

-Sí, eso era antes. Pero él me cabrea.

-¿Te cabreó cuando bailó con Sara?- me pregunta mientras da una calada al cigarro que le di.

-Sí. Él estaba molestando a mi amiga.

-No creo que sea sólo una amiga, por cómo la besaste justo antes de que se fuera -me dijo y me reí recordando lo que hice unos minutos antes.

-No, no es sólo una amiga- pensé en voz alta y sonreí.

-Me alegra que hayas superado a Melanie aunque creo que Sara es demasiado buena para ti.

-Lo sé. Es una chica muy buena e inocente.

-Pero hasta las más inocentes tienen un lado que nadie conoce y no son santas -comentó él.

-Bueno- solté unas risas cuando me acuerdo de lo que pasó detrás del árbol -tienes razón en eso- le di una calada a mi cigarro- ¿acaso tu viste...?

«Cuando estábamos detrás del árbol, él y Laura se estaban besando, a lo mejor nos vieron»

-¿Ver qué?

-Nada, solo son ideas mías.

Unos minutos después se despidió el cantante y ya era hora de irse. Me fui con Dylan, Laura y Kevin. Keren se fue hacia su casa junto con Maikol, y Nadia se fue con otras amigas. Cuando llegué a mi casa puse mi móvil a cargar y me apareció un mensaje de Sara. Sonreí y le respondí: Estoy ansiando verte de nuevo ;)

Tres días después...

MARTES

-Mañana en la tarde darán las notas del proyecto de hoy -me comenta Maikol.

-Pero si tú no lo entregaste- le dije.

-Es que estos días fueron muy movidos- suelta unas risas.

-No me interesa qué hiciste o con quien hiciste - le dije para que no diera detalles. Le quité el balón y corrí para anotar.

-¿Me ayudarás?- me pregunta intentado quitarme el balón.

-Sí, claro, pero ya yo entregué el mío así que no podré poner tu nombre en él.

-Tengo una idea- me dice y dejé de practicar.

-¿Qué se te ocurrió?

-Vayamos a su oficina y le escribes con tu letra mi nombre en la maqueta.

-No puedo. Nos van a atrapar - le afirmo.

-Vamos yo vigilo y tú entras, por favor. Te prometo que entregaré sin falta mis proyectos ahora en adelante- me insiste.

-Está bien, pero déjame cambiarme que estoy sudado.

-No hay tiempo. En este mismo momento que teníamos clase de baloncesto la profesora tenía clase con otro grupo- me dice Maikol.

-Está bien, vamos.

Caminamos sigilosamente por la facultad de arquitectura y llegamos a su oficina. No había nadie, Maikol vigilaba en el pasillo y yo comencé a buscar mi maqueta. Cuando la encontré todavía no tenía nota y cogí un bolígrafo e incluí a mi amigo. En cuanto devolví mi trabajo sonó un timbre que significaba la hora de almuerzo. Rápidamente salí pero cuando ibamos a bajar por la escalera la profesora estaba subiendo.