Mío (Chestappen)

Capitulo V

El avión había aterrizado, fácilmente podía decir que este fue el vuelo más difícil e incómodo que tendría en toda mi vida. Me hice el dormido la mayor parte del tiempo, eso fue así hasta que mi estómago no paraba de rugir así que no me quedo de otra que pedirle a la sobrecargo, que por cierto era diferente a la que no había visto a mi y a Max haciendo lo que sea que haya sido eso, un poco de comida.
Mientras comía Max no paraba de verme. Podia sentir su mirada fija en cualquier movimiento mío. No pude ni difrutar la comida ya que me empeñe en comer rápido y volver a mi tarea de hacerme el dormido.

En cuanto llegamos agarre rápidamente mi maleta y me fui disparado al hotel. Pude notar que Max quería decirme algo pero poco me importo y salí corriendo de aquel lugar. Estaba consciente del hecho de que de todas formas compartimos habitacion debido a aquel estupido plan de Christian, pero quería evitarlo el mayor tiempo posible.

Caminaba por aquellos pasillos de aquel gigantesco hotel hasta que alguien posó su brazo sobre mi hombro.

-Que tal Michel? Hace tiempo que no te veía- expreso aquel moreno el cual era el único que le permitía que me dijera por aquel nombre que odiaba tanto, Lewis está un alfa dominante, y un muy buen amigo mío, lo conoció desde hace mucho tiempo y siempre me apoyo en todo momento.

-Lewis! He estado tan ocupado que no he tenido tiempo de comunicarme contigo.- le dije con un todo deprimido.

-Estoy seguro que estás ocupado debido a aquel golpe que le diste a Verstappen.- río- Te digo un secreto? Bien merecido lo tenía.- me dijo en un pequeño susurro en el oido, cosa que me hizo cosquillas por lo cual solté una pequeña risa.

El al verme reír se quedó plasmado en su lugar cosa que se me hizo un poco raro, el lentamente posó su mano sobre mi mejilla y con su dedo pulgar me acaricio con un toque delicado. Sabía que Hamilton era muy cariñoso conmigo así que no se me hizo nada de otro mundo, por lo que le dedique una sincera sonrisa.

Pude sentir un pequeño olor a café en el aire. A decir verdad era un aroma muy placentero.

-Por cierto Checo... ¿Estás usando un perfume nuevo? Desde que llegué contigo hueles demasiado a chocolate y por otro lado un poco de whisky ¿Acaso tomaste?- me preguntó un poco confundido pero seguía manteniendo su mano en mi mejilla. Le iba a responder pero alguien me interrumpió.

-¿Qué crees que haces con mi compañero de equipo?- Max apareció de la nada y le preguntaba mientras le agarraba el brazo con el cual sostenía mi mejilla.

-¿Desde cuándo está prohibido convivir con otros pilotos?- le respondió Lewis con una mirada indiferente.

-Desde que esos pilotos marcan con su asqueroso aroma a un beta que ni siquiera se le es posible darse cuenta.- le respondió devuelta mientras que me alejaba de el.

-¿Qué?- pregunté confundió a Lewis. ¿El me estaba marcando como si fuera un Omega? Tal como lo dijo Max al ser un beta no puedo percibir las feromonas de otros subgéneros. Para ser sinceros si me enojaba un poco el hecho de ser marcado tal cual como si fuera un Omega.

-No lo hacía con una mala intención. Solo como una muestra de amistad. Y en todo caso ¿A ti que te importa Max?- Max simplemente se limito a rodar los ojos mostrándose indiferente y la verdad es que a él poco o nada le importaba lo que le dijera Lewis. Pude sentir cierta tensión entre ambos y estaba a punto de intervenir.

Pero por alguna razón me estaba empezando a marear. Podia sentir como mi nariz picaba y mi cabeza me empezaba a doler, también empecé a sentir un dolor punzante en mi vientre. Solté un pequeño gemido de dolor cuando sentí que el dolor de cabeza se intecifico.

Ambos alfas reaccionaron rápidamente y dejaron su pelea de lado. Se acercaron rápidamente a mi.

-¿Estás bien checo?- pregunto Max preocupado mientras me daba su cuerpo como apoyo.