CAPITULO 3

203 19 0
                                    

México es una persona realmente desagradable, el sigue siendo el niño de papi, un niño consentido que no ha aprendido a vivir. Quiero quitarle todo, destruirlo completamente.... Cuando esté listo lo moldeare a mi favor, su propósito será obedecerme.

He hecho demasiados experimentos, todos han fracasado de alguna manera, es algo frustrante, pero no puedo evitarlo, necesito que esta vez salga perfecto, no puedo dejar que el muera como los demás. Los otros eran...... Buenos? Pero no lo suficiente, tal vez un chico como el podrá ser la excelencia.

De repente mi teléfono comenzó a sonar, eso hizo que me distrajera de mis pensamientos.

*Llamada entrante*
Hermano "☎️ "

- ¿Ahora qué paso? -

- Nueva España y yo les aremos una visita la próxima semana, tu deber es hacer que México se vea presentable para la ocasión -

* Llamada finalizada *

Al parecer mi hermano nunca cambiará.

🍂

Después de la comida volví a aquel cuarto oscuro, era un cuarto pequeño, sin ventanas, lo único que se encontraba en la habitación era un triste colchón viejo, honestamente me daba un poco de asco dormir ahí, así que prefería el suelo, almenos el suelo no olía a podrido.

Me encontraba recostado en el suelo, para distraerme veía fijamente al techo y contaba números hasta perder la cuenta y empezar de nuevo, como un ciclo interminable. Hasta que Alemania había entrado a mi habitación.

- La vida es aburrida ¿Cuándo podré morir? - me miró con lástima, odio que me vea así, se que lo hace solo para molestarme, pero honestamente odiaba este lugar, estuve encerrado en este pequeño cuarto, durante almenos una semana.

- ¿Por qué tienes una pésima actitud? -

- Porque estoy encerrado en este horrible lugar -

- Ven, no digas eso, quieres algo de comer? Podemos hacer una excepción hoy y cenaremos viendo la televisión - Alemania trato de tomar mi brazo para poder levantarme, instantáneamente trate de soltarme.

- Déjame solo - le dije sin muchos ánimos.

Al parecer no debí decir eso. De repente sentí un golpe en mis contillas, Alemania me había soltado una patada en mis costillas.... Yo solo me retorsi eso dolor.

- No fue una pregunta - tomo mi cabello y lo jalo fuertemente - ¿Quieres otro golpe? - yo negué rápidamente.

Esa noche fue un tanto extraña, Alemania estaba siendo amable conmigo, ¿Acaso esto es un secuestro o un intento de cortejo? Me hizo de cenar algo sencillo, huevos con tocino y un poco de pan para acompañar.

- ¿Por qué haces esto? No se supone que estoy secuestrado? Me tratas como si fuéramos cercanos -

- Tu eres de mi propiedad, me gustaría que nos lleváramos bien, está casa será tu pequeña prisión, - se hacerco a mi y me dio un rápido beso en mis labios.

- No se, ni siquiera se en qué lugar estoy, lo único que conozco de esta casa es la cocina, este cuarto y esa horrible habitación en la cual yo duermo - Alemania me dirijo una sonrisa.

- Pronto te daré un recorrido, debes demostrarme que no escaparas de aquí, además, si llegas a salir de esta casa probablemente mueras en el bosque - me quedé un poco decepcionado, no soy bueno para la supervivencia, ni siquiera se cocinar un simple huevo, no tenía chance de sobrevivir allá afuera.

- No te preocupes, soy una persona inútil por si solo, solo me gustaría conocer esta casa un poco más -

- Bien, la casa es grande, así que el recorrido será rápido, la cena puede esperar un poco más -

El recorrido empezó por la planta baja, lo único interesante fue la cocina y la sala, la cocina era moderna y lujosa, me gustó la estufa eléctrica, la sala fue mucho más impresionante, la pantalla plana si que era muy grande, con un buen sonido. La siguiente parada fue el jardín, era demasiado grande, parecía no tener límite, estaba lleno de flores, todo el jardín estaba lleno de flores rojas, no había de otro color dándole un gran diseño al jardín, y había un lindo kiosco... Me hubiera gustado verlo más de cerca, aunque lo más impactante fue aquel tipo de estatua o monumento, era su padre.... Le habían inmortalizado su imagen en una escultura, por la distancia en la que le encontraba no podía alcanzar a leer la inscripción que tenia, tal vez pronto podria verla más de serca. El segundo piso no tenía nada interesante, aunque el tercer piso fue sorprendente, el tercer piso era una enorme biblioteca, no había ni un baño, todo ese espacio era una biblioteca, tenía una enorme ventana, a través de ella podía ver el bosque... Se veía bastante lindo y acogedor.

- ¿Te gusta? -

- Si, aunque no me interesa leer algún libro, se ve acogedor -

- Tu vida ya tiene un final destinado, no podrás salir de aquí jamás, amenos que sea necesario, será mejor que encuentres un libro de tu interés -

Después de eso Alemania no me volvió a dirigir la palabra, ambos nos quedamos en silencio, así que di un pequeño recorrido, la biblioteca era demasiado grande.

- Ya es hora de cenar - Ordenó Alemania.

- Enseguida voy -

Rápidamente me acerqué a él, Alemania tomo mi mano y nos dirigimos a su habitación nuevamente. El transcurso de la noche paso normal, Alemania se decidió por poner una película de comedia, yo me aburrí rápidamente, aquella película estaba en alemán, yo no era experto en ese idioma, así que no pude entender la película. Alemania por su lado se reía constantemente, cuando termino la película comenzó a juntar los platos que usamos, y sin dirigirme la palabra se fue de la habitación. Instantáneamente supe que esta era mi oportunidad de recorrer la caso por mi propia cuenta, podré ser un drogadicto y un inútil, pero no soy alguien tonto, Alemania está planeado algo, su actitud extremadamente amable es sospechosa.

Con el plan en mente supe que la biblioteca sería el mejor lugar para esconderme por la noche, Alemania estaba en la planta baja así que no sería coherente bajar, en la segunda planta había muchas habitaciones pero sería muy fácil encontrarme, en la biblioteca pide haber varios lugares en los cuales podría ocultarme, además de lo enorme que es. Rápidamente corrí hacia las escaleras, lo primero sería pasar desapercibido, así que subí lo más rápido posible. Dentro de la biblioteca no supe donde esconderme, en el primer piso solo había estantes y repisas llenas de libros, subi rápidamente al segundo piso para poder encontrar algún buen lugar para esconderme un buen rato.

- ¡ Eres un hijo de puta, mierda! ¡MÉXICO! - pude escuchar a Alemania gritar, con desesperación empecé a recorrer todo el lugar, de repente me tropecé, para evitar caerme alcance a sostenerme de la repisa. Despacio me senté en el suelo recargadome en la repisa, solo estaba esperando mi final amargo.

🍂





¿Síndrome De Lima? ¿Estocolmo? AleMexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora