Climax Decisivo

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La extensión de dominio se activo y tanto Deux como Yami quedaron dentro del ritual. Un río de sangre estaba bajo los dos hermanos y quemaba sus pies, mi siquiera el propio usuario controlaba bien aquella extensión aún.

Deux volvió a acortar la distancia entre ellos avanzando lentamente; en un costado de su cintura, una katana con mango blanco reposaba en su saya, parecía ser nueva al punto en que tenía la sensación de no haberse usado nunca, ni siquiera para un desenfundado.

Yami: Bastardo, así que tú tenías mi Kusanagi, no?. - dijo el joven en un tono divertido. - Bien dicen que ladron que roba a ladrón... tiene mil años de perdón.

Deux: Tú también tienes a mi Black Rose, estamos a mano. - el desenvaine rápido potenciado con energía maldita logró penetrar la defensa de Yami y dejarlo desprotegido. - Nunca pensé que te mataría yo mismo después de querer salvarte...

Yami: ¡Ahhh...! - por primera vez en su vida, el mercenario estaba sintiendo dolor. - ¡Tú no puedes matarme! ¡No te lo voy a permitir...! - al intentar atacarlo, unas lanzas de sangre lo atravesaron y lo incapacitaron. - ¡Déjame salir!

Deux: Intenté que te estuvieras, pero eres demasiado terco. Tu camino debe parar ahora, te mataré aquí mismo.

Yami: No... - estaba contra las cuerdas, Deux estaba más cerca con cada paso que daba. - ¡Aléjate...! - una mano sujetó su rostro nublando su vista. - ¡No lo hagas, hermano!

Deux: Adios. - la mano del hechicero aplastó la cabeza de su hermano y la sangré que lo atravesaba terminó de infectar el cuerpo. - No pude salvarte Yumi, disculpame...

Los demás estaban descansando y tratando de contener el sangrado que ambos chicos tenían. Mei, Nobara e Itadori sintieron cuando todo sucedió, estaban aliviados de que su plan hubiera funcionado.

A pesar de que Tn estaba fuera de peligro por haber evitado un corte fatal, Alexandro no estaba mejorando para nada y la sangre seguía escapando de su cuerpo; Nobara seguía presionando la herida y tratando de contactar a Gojo por teléfono mientras Itadori la asistía.

Deux llegó ante ellos y simplemente caminó hacia Alexandro para extender su mano hacia la herida e inyectarlo con su aguja de sangre. La herida comenzó a cerrarse mientras el rostro del chico recuperaba color, eso significaba que el mercenario había superado el combate y obtenido la victoria.


Itadori: Estás bien...? - Yuji había notado que ahora su compañero poseía un ritual inverso. - Supongo que... Hiciste lo que creo que hiciste...

Deux: Así es, nuevamente estoy solo... - suspiró y se puso de pie acercandose a Mei. - Estoy en deuda contigo, muchas gracias. Si bien no la salvé, su muerte no quedó impune. Tendrás tu paga mañana.

Mei: Olvida el pago, solo dime que lo hiciste sufrir hasta su último aliento. - era la primera vez que rechazaba dinero, Yumi había sido su amiga, también quería vengarse.

Deux: Tranquila, está muerto que es lo que importa. - ahora se había acercado al chico de Mei, lo inyectó y le regaló una sonrisa. - Eres más fuerte de lo que pensaba, jamás bajes las manos y sigue adelante.

Love, Money And Curses [ Lector × Mei Mei ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora