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Ꮺ ָ࣪ un cepillo para jaemin 𓂃

La pequeña había terminado muy cansada ya que había sido un día muy movido para ella, mientras Jeno la arropaba en su cuarto, Jaemin se encontraba en la cocina clasificando la basura.

–Gracias por la ayuda. – Dijo Jeno entrando a la cocina.

–No agradezcas. – Le sonrió.

–¿Quieres tomar algo? ¿Una cerveza tal vez?

–Una cerveza está bien. – Aceptó.

Jeno sacó dos cervezas del mini enfriador, las destapó y las colocó sobre la barra. Jaemin dejó la bolsa de basura y se sentó a su lado.

–Se veía muy feliz. – Habló el más alto.

–Le encanta pasar tiempo con sus tíos.

–Tu regalo fue precioso.

–No creo que le haya podido ganar al tuyo. – Rio un poco.

En eso, el teléfono de Jeno comenzó a sonar, miró la pantalla y rechazó la llamada. Suspiró.

–¿Todo en orden? – Preguntó Jaemin.

–Sí... Es mi exnovia, quiere verme.

–Le prometiste a Chaewon que ya no la verías...

–Lo sé. – Rascó su nuca.

–Quieres ir a verla. – Adivinó decepcionado Jaemin.

Jeno negó con la cabeza.

–No estoy tan urgido como para correr a sus brazos. – Rio.

–Nunca te viste... Bueno... ¿En algo serio o algo así?

–Para serte sincero, no. De las novias que he tenido, nunca me vi casado con alguna. – Aceptó. –Suena muy estúpido, lo sé, pero es que no he logrado verme a lado de alguna mujer que no sea Chaewon.

–¿Y la madre de Chaewon? – Preguntó Jaemin curioso.

–Bueno ella... - Terminó de un trago su cerveza. –Salí con ella un tiempo, un día nos pasamos de copas y lo hicimos sin protección, dos meses después llegó a mi puerta diciendo que estaba embarazada.

–¿Qué pasó con ella?

–Me dijo que abortaría si no le daba algo a cambio. – Contestó Jeno mirando al piso. Jaemin se llevó una mano a la boca sorprendido. –Claramente no la dejé, pero me obligó a pagarle un montón de cosas de lujo, además de un buen ginecólogo y un buen hospital donde dar a luz. Realmente eso no me pesaba. Después de tenerla se fue, ahora debe estar en Berlín o algún lugar así, no tengo idea.

–¿Cómo puede una madre abandonar así a su hija? – Preguntó Jaemin indignado. Jeno se encogió de hombros.

–No estaba en los planes de ninguno ser papás. Fue un descuido, alguien tenía que hacerse cargo, ¿no? Además, como te dije, no me veía formando una familia a su lado, eso solo hubiera traído problemas para Chaewon.

–¿Te arrepientes...?

–He cometido muchos errores en mi vida, pero tenerla, tenerla te juro que es lo único que he hecho bien.

–Debió ser difícil ser padre soltero... Al principio, claro.

–Lo fue. – Rio. –No tenía ni la menor idea de cómo cambiar un pañal, mucho menos cómo preparar un biberón o qué cosas podía comer o no. Tuve mucho apoyo de sus tíos, en especial de Haechan. Creo que más que adaptarnos nosotros a ella, ella aprendió a soportarnos a nosotros.

–No digas eso, en verdad los ama.

–Es una niña preciosa. – Asintió Jeno.

–Demasiado. – Aceptó Jaemin.