➳ décimo capítulo [segunda parte]

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Hoseok no había querido aceptar aquella invitación, ni siquiera recuerda exactamente por qué lo había hecho en su momento, pero ahí estaba, conviviendo nuevamente con Taehyung, Minjae, sus mellizos y su pequeña Hyesun, quien se había quedado dormida en sus brazos hace más de una hora, ni siquiera había disfrutado mucho del zoológico, más que otra cosa había preferido comer golosinas y después de eso lanzarse a sus brazos a hacer un berrinche porque no le compraron el peluche que quiso en la tienda de regalos.

— ¿Cómo está? ¿Ya se durmió? — preguntó Taehyung, acercándose a su hombro para ver la carita de su pequeña Hyesun, la niña estaba con la boca entreabierta, mojando la camisa de su padre con la baba que botaba.

Hoseok apenas asintió, manteniendo su mirada fija delante de él, en el pequeño retrato familiar que formaba MinJae al tener a su mellizos sujetos de la mano, los niños parecían divertirse mucho con su "tío" y sobre todo, estar felices a su lado, se había quedado embobado tanto tiempo en aquella imagen que por un momento llegó a pensar que hasta el hombre hacía un mejor trabajo como padre que él.

— Hey, MinJae solo trata de ser amable con ellos. — las palabras de Taehyung lo sacaron de sus pensamientos, aquellos pensamientos muy tóxicos que solo le hacían sentirse desplazado e incluso muchas veces celoso. — Los niños saben que tú eres su padre y te quieren por mucho.

Hoseok trató de convencerse con aquellas simples palabras, pero sabía que Taehyung solo estaba diciéndole aquello por lástima, pues hasta los pequeños adoraban a MinJae y no era algo que tuviera que generarle incomodidad, al contrario, tendría que estar feliz de que sus hijos puedan entablar una buena relación con la pareja de su otro padre.

— Lo sé. — se limitó a decir, aunque tuviera atorado un "pero" en la garganta.

Taehyung no se sintió conforme con aquella respuesta, casi nunca se sentía conforme con las respuestas de Hoseok, muchas veces habían tenido diferencias por aquello, pero nada que una buena conversación de pareja no pudiera solucionar, lamentablemente ya no podían tener ese tipo de conversaciones, no ahora ni nunca.

— ¡Mami! ¡Mami, ven! — gritó Soobin, acercándose a dónde se encontraban sus padres, pero tomando la mano de Taehyung para guiarlo hacia la siguiente parada, en donde verían a un león.

Hoseok sonrió al ver la emoción en su hijo y lo siguió, a pesar de que su pequeño solo jalaba de la mano de su "madre".

Al llegar se encontraron con la pequeña SeolHyun en los brazos de MinJae, sonriendo entre emocionada y nerviosa al ver al león.

— ¡Yo también quiero que me cargues, tío MinJae! — gritó Soobin, exigiendo que el hombre lo cargara al igual que a su hermana.

— Cariño, tu padre también puede cargarte. — le recordó, Taehyung, al ver la mueca de incomodidad presente en el rostro de Hoseok.

— ¡No! — gritó ya un poco enojado el niño. — papá está cargando a Hyesun y yo quiero que el tío MinJae me cargue a mí.

Hoseok entendía muy bien a sus hijos, ellos solían ser muy consentidos y muchas veces se encariñaban mucho con las personas nuevas que conocían, también había ocurrido con JiMin, cuando este fue presentado oficialmente a la familia como amigo de Taehyung, aún recuerda que sus hijos se habian emocionado tanto con la presencia del terapeuta que por un momento se pusieron a llorar al no decidirse quien iba a jugar primero con él.

— Está bien, Soobin, yo te cargaré. — dijo finalmente Taehyung, para evitar un berrinche de parte de su hijo.

Solo estando a un lado, Hoseok se sintió nuevamente desplazado y viendo a Taehyung y MinJae junto a sus hijos se sintió aun peor. Él en verdad no entendía el porqué de sus celos y enojo, siempre se había llevado bien con MinJae, seguía insistiendo en que le caía muy bien e incluso habían salido muchas veces, pero justamente en ese momento, con sus hijos, le caía de la patada y solo quería decirle que soltara a una de sus princesas. A veces Hoseok no se entendía, a decir verdad.

— ¡Mamá! ¡Mira mami! — gritó SeolHyun, señalando lejos de ellos. Hoseok solo en ese momento se dignó a ver a dónde apuntaba su hija, arrepintiendose al instante. — ¡Es el tío Minnie! — volvió a chillar la niña, llamando la atención esta vez de todos, incluyendo MinJae.

Si Hoseok se sentía celoso minutos atrás, ahora mismo se encontraba enojado. JiMin estaba riendo al lado de un chico, un chico muy guapo, alto y con un aspecto de chico malo. No le gustaba para nada y no pensaba disimular lo contrario, por lo que sin dudarlo se encaminó hacia ellos, importándole muy poco que Taehyung le haya dicho que no interrumpieran la salida de su amigo.

— ¡JiMin! — el grito de Hoseok no solo llamó la atención del mencionado, también del acompañante de este.

La mirada del pelirubio demostró sorpresa, aunque poco después se transformó en enojo. Hoseok lo conocía muy bien como para saber sus facciones y expresiones, y podía apostar que en ese preciso momento JiMin estaba más que enojado con él.

— Hoseok, ¿Qué haces aquí? — y por más que el terapeuta estaba enojado, supo disimularlo muy bien, pues una sonrisa se encontraba adornando su rostro.

Y aunque Hoseok tampoco se encontraba del todo alegre, también supo disimularlo muy bien, demostrando una de sus mejores sonrisas.

— Vine con la familia. — contestó el pelinegro, dando media vuelta para señalar a Taehyung y MinJae, quienes se iban acercando de a poco.

— JiMin. — saludó apenas Taehyung, sintiéndose algo enojado con toda esa situación. No podía creer que Hoseok haya sido capaz de prácticamente correr hacia los brazos de sus mejor amigo, a pesar de que advirtió que no lo hicieran.

— JiMin, no pensé que estarías en el zoológico el día de hoy. — se sumó MinJae, el único que parecía alegre en verdad por el encuentro. — De lo contario te hubiéramos invitado a ti y a tu...

JiMin se sentía incómodo con toda situación, en especial por la mirada que le dirigía Taehyung y a su vez, Hoseok, ambos parecían tener algo pendiente con él y no entendia por qué, no había hecho nada malo.

— Soy Jungkook, un compañero de trabajo de JiMin.

Solo en ese momento el pelirubio se dio cuenta de lo maleducado que fue, se había quedado tan perdido en la mirada de Hoseok que había olvidado por completo presentar a Jungkook.

— Lo lamento, y-yo... — JiMin trato de excusarse tras una sonrisa, pero la mirada de Taehyung cada vez era más penetrante y parecía que su presencia ahí no era bienvenida, no al menos para su amigo y paciente. — Jungkook y yo solo salimos un rato para distraernos.

— No sabía que estabas saliendo con alguien. — se apresuró a contestar Hoseok, mirando esta vez al hombre que parecía hacerle competencia también.

— N-no, no estamos sali-

— En realidad sí. — contestó igual de rápido Jungkook. El hombre parecía querer burlarse de Hoseok, pues la sonrisa de superioridad que le mostró fue más que suficiente para el padre de familiar. — JiMin y yo estamos saliendo.

Y eso fue más que suficiente para que esa encuentro se acabara, pues Hoseok no dudó ningún segundo en despedirse, excusándose en que la pequeña Hyesun se despertaría en cualquier momento, lo cual fue una mentira para Taehyung, pues él conocía muy bien a su hija y sabía que no estaba ni cerca de abrir sus ojos.

A pesar de que Taehyung quiso decir algo durante el camino a casa respecto a aquel encuentro no pudo hacerlo, pues MinJae fue el que con la mirada le indicó que lo mejor era mantenerse callados, ya que aquello no era de incumbencia y claro que lo era para él, pues se trataba de su ex esposo y su mejor amigo. No podía simplemente quedarse con los brazos cruzados y fingir que nada de eso le enojaba, cuando en realidad si lo hacía, no sabía exactamente el porque, pero lo hacía completamente.

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Tardé demasiado en actualizar esta historia, me disculpo, pero tuve mis razones beibis.

Espero que igual lo sigan leyendo y estén atentas, porque habrán más actualizaciones.

Nos vemos y ¡Feyliz año! ♡♡

Buenos padres ➳ HopevDonde viven las historias. Descúbrelo ahora