Carol se quedó contemplando a su hermana que estaba en el suelo inmóvil, sin moverse ni un ápice desde que la apartó de ella. No se podía creer lo que acababa de hacer, no había medido las consecuencias de sus actos y por no hacerlo, había golpeado a su hermana haciendo que de su cabeza empezara a brotar sangre. ¿Ahora qué iba a hacer?Lentamente Carol se acercó a Danna, apartando de su rostro unos cuantos mechones de pelo que le cubrían el rostro ensangrentado, estaba totalmente pálida.
Carol empezó a sollozar fuertemente mientras veía borrosamente el cuerpo de Danna tendido en el suelo, a causa de las lágrimas que le caían a borbotones por su mejilla... Se quedó en estado de Shock al ver que hizo algo horrible, monstruoso, abominable... ¡Mato a su hermana!
Se levantó del suelo, sintiendo que sus piernas estaban temblorosas y no la sostenían del todo, a punto estuvo de caer al suelo, pero con todas las fuerzas que pudo reunir, se mantuvo erguida y con otro esfuerzo más se incorporó hacia su hermana para cogerla en brazos, llevándola hasta el sofá y recostándola allí mientras la contemplaba.
La expresión que tenía dibujada su hermana en el rostro era de serenidad, tranquilidad... Paz.
Carol comenzó de estar en estado de Shock a perder la cordura, su mente borró todo atisbo de lo que era verdadero o falso, de lo que era realidad o no.
Se acercó a Danna cuidadosamente pensando en no despertarla, cogiendo delicadamente su cabeza para sentarse y depositar encima de sus piernas la cabecita de Danna mientras le acariciaba el rostro, quedándose luego mirando fijamente el rostro de su hermana, que ahora para ella le decía que sólo estaba durmiendo profundamente y no... Muerta.
- Sí, estás durmiendo ¿Verdad Danna? - Dijo Carol esperando la contestación de su hermana o que mostrara algún indicio de que se despertaría en algún momento, algo que... Nunca sucedió.
La madre de Carol y Danna decidió volver a casa ese mismo día, al encontrar a su padre mucho mejor de salud... Su marido sin embargo se quedó, ya volvería más tarde después de descansar un poco por el largo viaje que habían realizado.
No sabía por qué, pero sentía una terrible ansiedad, un mal presentimiento que le era difícil de explicar y que no se le iba, motivo por el que decidió volver ella sola, sin esperar ni un segundo más.
Seguramente se le iría esa mala sensación en cuanto llegara a casa y viera a sus dos hijas. Tan sólo faltaban unas cuantas calles para llegar.
Pero nadie la preparó, para lo que iba a ver en cuánto llegara a casa...
Unos cinco minutos más tarde llegó al umbral de su casa, sentía mucha ansiedad por ver a sus niñas, así que saco apresuradamente las llaves de su bolso de mano y abrió la puerta.
Todo estaba a oscuras pero desde el salón le llegó el sonido de alguien tarareando algo. Supuso que sería la voz de su hija mayor, pero le pareció extraño ya que eran apenas las ocho de la mañana y siempre sus dos hijas dormían hasta tarde.
Se dirigió hacia el salón y encendió la luz, pero lo que vio la dejó sorprendida.
Carol estaba mirando a su hermana, mientras tarareaba y le acariciaba el rostro a Danna que al parecer estaba sumida en un sueño profundo.
- ¡Hola hija! Al parecer cediste por fin en darle un poco de cariño a... - La madre de Carol se paró en seco, al ir hacia ellas se dio cuenta de que su hija menor estaba cubierta de sangre. - ¡Que ha pasado! ¿Porque tu hermana está cubierta de sangre? - Dijo muy alterada.
Fue hasta Danna y se agachó a tocarle la mejilla, notando que estaba fría. Mientras lloraba desconsoladamente acercó su oído al pecho de Danna, para ver si escuchaba los latidos de su corazón pero... no latía.
- ¿Carol, que ha pasado? ¡Contéstame! - Empezó a llorar descontroladamente mientras zamarreaba a Carol desesperadamente, intentando que saliera de su ensimismamiento y le explicara porque estaba su hermana muerta.
- Mamá no llores, Danna solo está durmiendo. - Le dijo de repente Carol pero siguiendo mirando a la nada.
Y de repente se asustó, Carol empezó a reírse descontroladamente repitiendo una y otra vez:
"No te preocupes mamá Danna sólo está durmiendo".
La madre de las chicas no se lo podía creer, Carol había perdido la cordura... Había perdido por completo a sus dos hijas. Una se hallaba allí enfrente de ella muerta y la otra se había vuelto... Loca.
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Relatos Cortos (EDITANDO)
RandomRelatos cortos, narra la historia de personas que cuentan cómo en su día a día intentan encontrarse un sitio en la sociedad, la vida... Deseosos de encontrar su ansiada felicidad, su libertad fisica o emocional y en el que muchos de ellos se encuent...