Tercer libro de una saga basada en los juegos de Pokémon creados por Game Freak. En esta historia, Ryusui, Tochigi y Haruka, tres amigos que casi se podrían considerar familia, viajarán por la región de Hoenn en busca de aprender sobre las Batallas...
Como, convenientemente, en la ciudad se celebraría un Concurso Pokémon, nuestros héroes usaron sus SmartRotoms para ver una presentación de Lutia, la Reina de Hoenn, con Aolu, su Altaria. Tal vez para aprender de qué trata esta mecánica o algo por el estilo.
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—¿No crees que es sublime, Haruka? —le preguntó Ryusui a Haruka—. El día de hoy, tú y tus Pokémon se subirán a ese mismo escenario y les demostrarán a todos lo que realmente valen.
—¿Pero no estaba haciendo eso con los Líderes de Gimnasio? —le cuestionó, a lo que nuestro prota respondió— Sí, pero hay más de una forma de probar tu valía y los Concursos son un claro ejemplo de ello.
—N-No entiendo muy bien por-por qué a la gente le gustan los Concursos Pokémon —comentó Tochigi—. De s-seguro, H-Hyuga se avergonzaría de tener cerca a esa cla-clase de p-personas.
Al oír eso, su prima se rio y lo contradijo— No, todo lo contrario. Hyuga es un fanático obsesivo de los Concursos Pokémon. Tanto que observa por transmisión en vivo las presentaciones de Hikari.
—¿D-De verdad hace e-eso?
El de los ojos de lava se encogió de hombros— Puede ser. Como sea, dejando de perder el tiempo y dirigiéndonos al auditorio.
Al dirigirse al Auditorio de Ciudad Kaina, Haruka pidió al recepcionista que le diera un Pase de Concurso y él obligó a la chica a firmar unos términos y condiciones en tres lugares diferentes y después, escoger entre una gran variedad de Vestidos de Gala que las Coordinadoras de Hoenn deben usar de forma casi obligatoria.
Como Haruka era bastante indecisa, Ryusui y Tochigi fueron a los camerinos con ella para ayudarla.
—¿Le-Les digo la verdad? Ese V-Vestido de Princesa que Hikari usa en sus Concursos, ahora me pa-parece más presentable que... Todo esto —comentó el de rojo con visible incomodidad por los trajes tan pequeños y desnudos.
