Tercer libro de una saga basada en los juegos de Pokémon creados por Game Freak. En esta historia, Ryusui, Tochigi y Haruka, tres amigos que casi se podrían considerar familia, viajarán por la región de Hoenn en busca de aprender sobre las Batallas...
Después de que Tochigi capturara al Vulpix y al Slugma que los ayudaron, Keisuke llamó al Profesor Soraishi para informarle que recuperaron el meteorito y que iban a devolvérselo, pero este les dijo que lo conservaran, ya que era un regalo. Eso sí, debían cuidarlo muy bien y asegurarse que no volviera a caer en manos equivocadas.
Como ya el peligro había pasado, los héroes tomaron el teleférico, que ya funcionaba de nuevo, y lo usaron para llegar rápidamente a Pueblo Fuen, un pequeño pueblo de Hoenn, conocido por sus deliciosas aguas termales por las que nuestros protas planeaban pasarse después de ganar la medalla.
—Don Keisuke, usted mencionó que, en este pueblo, se encuentra su casa, ¿no? —le preguntó Ryusui y Keisuke asintió con la cabeza.
—Así es —señaló la casita que se encontraba al lado de las termas del pueblo—. Esa es Mi Casita Ackerman. No es la gran cosa, pero, al menos tengo electricidad, internet, agua y gas. ¿Qué más podría pedir?
—Hablando de pedir, ¿no será mucha molestia que usted vea nuestra Batalla de Gimnasio? —le pidió Haruka.
—Eso era justo lo que iba a hacer —respondió para luego sonreír—. Hace tiempo que no los veo y quiero ver qué tan buenos Entrenadores son.
—¡Súper! —exclamó Tochigi.
Ryusui, Tochigi, Haruka y Keisuke se dirigieron al Gimnasio Fuen, donde fueron recibidos por el referee, como de costumbre.
—Les doy la bienvenida al gimnasio, aspirantes. Ah, y veo que Keisuke del Alto Mando también nos honra con su presencia —hizo una reverencia ante el Soldado Negro—. Bueno, deben saber que la líder Asuna se especializa en Pokémon de Tipo Fuego y, a pesar de solo llevar unas semanas como líder, no es para tomársela como un juego.
—Pu-Pues claro. Es una Entrenadora de Tipo Fu-Fuego, después de todo —expresó Tochigi.
Keisuke fue a las gradas y los jóvenes se dirigieron al campo de batalla, que estaba rodeado por un manantial humeante. Lógico, ya que el gimnasio es de Tipo Fuego. Allí, se encontraron con la Líder Asuna. ¡No te acerques mucho, que te quema! Perdón, se me salió.
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—¡Encantada de conocerlos! ¡Yo soy Asuna, la Líder del Gimnasio Fuen! —exclamó la líder Asuna— ¡¿Están listos para un combate al rojo vivo?!
El de los ojos de lava se sobó los oídos por los gritos de Asuna y respondió— ¡Claro que sí! ¡Yo voy a ir...! —pero fue detenido en seco por Tochigi.
—O-Oye, ¿recuerdas que en el Bosque Touka, t-te conté cuál era mi objetivo? —le preguntó el de los ojos de abismo.
—Obvio. Quieres volverte el mejor Entrenador de Tipo Fuego del mundo, ¿pero qué tiene que ver con...? —se dio cuenta de a qué se refería— Ah, ya veo. Bueno, esta es tu pelea y tu oportunidad de brillar, compadre —le dio una palmada en el trasero para que fuera y sonrió—. ¡Ve a por todas!
