𝐓𝐀𝐑𝐈𝐊 | 𝟢𝟢𝟧

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Tarik intentó dormir aquella noche y le fue imposible no sentirse ansioso porque llegue la maldita mañana

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Tarik intentó dormir aquella noche y le fue imposible no sentirse ansioso porque llegue la maldita mañana. Cuando la hora llegó, se levantó pronto de la cama eh inició a prepararse para poder salir finalmente de esté palacio horrendo.

──¿Ya estás fuera de la cama? ──Osiris llegó —como todas las mañanas— y fue la primera vez que encontró a su hijo levantando. Al parecer la idea de explorar su reino le hacía divertida──. Sospecho los motivos por los que te hayas tan ansioso.

──Lo prometiste. ──recordó solo para evitar que esté dios se retractara de lo prometido ayer. Osiris no haría tal cosa, sí, se sentía algo nervioso al dejarlo ir hacía un mundo completamente nuevo del que solo sabe muy poco, pero tiene derecho de conocerlo. En el futuro, Tarik gobernaría el Duat. Esté reino le pertenecería.

──Lo sé. ──el dios de la vida se aproximó hasta su hijo. Tomó algo que guardaba y se lo mostró antes de ponérselo en el cuello──. Solo te pediré que uses esto mientras estás conociendo tu reino.

──¿Por qué me pides que use un collar tan horrendo? ──reprochó, pero se dejó colocar aquel collar extraño de una bonita piedra roja que se encontraba en medio de un anj de oro. No es joyería que el príncipe acostumbra a usar. El peso de esa cosa era algo incómodo.

──Solo úsalo mientras estás halla, ¿puedes prometerme que no te lo quitarás? ──pidió el rey mientras finalizaba de atacar los listones detrás de la espalda del menor──. Te protegerá. En Duat es un reino que no conoces, puede ser peligroso.

──Nada es más peligroso que yo. ──aclaró.
Osiris no podía dejar de hallar a su hijo tan adorable. Le encantaba cuando oía decir frases como estás, porque le recordaba demasiado a Seth.

──Por supuesto, nada te supera. ──a Tarik le molestó el que él se haya atrevido a abrazarlo por detrás de su espalda. Quedó demostrado que el dios de la vida era una cabeza más alto que él.
Deseaba matarlo, alejarlo de él...pero tenía que soportar un poco más. Solo un poco más──. Bien, no esperes más. ──finalmente──. Tienes mí permiso de salir del palacio, regresa con seguridad y recuerda, no oigas, no mires y tampoco toques nada de allí. ¿Entendido?

──Si, si. No tienes que repetirlo todo el tiempo. ──apartó los brazos de esté de encima suyo para poder salir del dormitorio eh ir hacía la salida del palacio.
La entrada a esté lugar se hallaba repleta de almas que llegaban del mundo de los vivos a ser juzgados por sus pecados ante Osiris. Dos enormes chacales de pelaje negro lo escoltaban lo escoltaban teniendo la atenta mirada de todas aquellas almas puestas en él. No parecían temerle y se debía a que no estaba portando su nemes de león —el principal objeto que lo caracterizaba—

Al llegar hasta la entrada del templo, el aroma del azufre incrementó eh hizo que él príncipe se quejara de esté. Su mirada viajó alrededor del lugar y, tal y como lo imaginó, el Duat era un lugar verdaderamente horrible.
Tal y como lo suelen mencionar, el Duat es un lugar en donde los difuntos aguardaban el paso de la aprobación después de someterse a ser ajusticiados por Osiris. Por esa razón aquella fila era bastante larga, pues la mayoría de ellos aguardaban a poder estar en frente del dios de la vida.

𝐓𝐀𝐑𝐈𝐊 ────ennead.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora