41. El Ruido de las Cosas al Caer

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(Pequeño detalle: Los nombres se pronuncian en inglés a menos que el lore del personaje diga lo contrario, aclaro esto porque muchos nombres en español suenan raro en comparación, como Simón y Simon, hablando del personaje y no la vida real)

Mark buscó por minutos a Simon, nadie en el instituto tenía la mínima idea de su ubicación, caminó por varias partes del Kirkwood y aún nada, pero un llanto llamó la atención de nuestro protagonista, en los baños de aquel lugar Mark dio con el portero suplente rubio, este lloraba desconsolado y sin parar.

— Calma... Si vuelven a molestarte te protegeré — Con estás palabras, abrazó a aquel chico cuya cara solo contenía lagrimas y dolor, el gesto de Mark causó que Calier no se sintiera solo en una situación tan dolorosa, dentro de la mente de Mark el recuerdo de ser humillado vivía latente aún cuando ignoraba todo lo relacionado a su pasado, esto le hizo simpatizar con Simon.

El y Mark no tenían una conexión, no eran amigos, familiares o del mismo instituto, pero compartían la pasión por el fútbol y las ganas de ser porteros de élite, las lágrimas de Simon tardaron un buen rato en detenerse y solo en ese momento ambos jugadores tuvieron la oportunidad de hablar con calma.

— No puedes quedarte en un club que te trata así, no es sano — Mark aconsejaba al rubio con la intención de que este no se dejara pisar por sus "compañeros", la situación era cruel y Mark quería hacer algo al respecto.

— Pero... Bueno... Tal vez... — Ninguna oración coherente se pudo formar, la inseguridad reinaba en la mente de Calier, el llevaba mucho tiempo siendo parte del equipo de fútbol del Kirkwood y estudiar en ese instituto luego de irse del club le causaría muchos más problemas.

— En poco me debo ir, por mucho que seamos dos desconocidos, no quiero marcharme y sentir que pude haberte ayudado, piensa en salir del club — Mark no consideraba que quedarse en el club ayudaría a la confianza de Simon, pues había notado lo inseguro que este era, se comparaba a dejar un cubo de hielo en un edificio en llamas.

— No es tan fácil... — Calier seguía sin poder convencerse de la idea, temía a las posibles repercusiones que sufriría en caso de abandonar al club, y si a algo le tenía miedo era a sus compañeros.

— Simon, créeme que no es bueno que te quedes... — Otro rubio se acercaba, era Syon Blaze, el delantero recorrió por varios minutos el Kirkwood en busca de Mark y vio a los dos porteros hablando.

— Syon... Hace mucho que no hablamos... — Simon sonrió con tristeza, Mark tardó varios segundos en darse cuenta que los dos rubios se conocían desde hace ya tiempo.

— Desde que Axel se marchó, y tú deberías hacer lo mismo — La revelación sorprendió a Mark, aunque ahora no tardó en hacer la conexión, Axel estudió en el Kirkwood y Syon solía visitar el club de fútbol para jugar con ellos.

— Pero... Sin el club nunca pude destacar... — Simon es un chico inseguro, pero hace ya tiempo fue aún más inseguro, podía ser difícil de creer pero tuvo una gran evolución en ese aspecto.

— Todos se fueron del Kirkwood por las mismas razones, desde Axel a Erik — Syon nunca se interesó en el Kirkwood pero por el poco tiempo que visitó el instituto vio todo lo bueno y lo malo.

— Es diferente... Ellos brillaban por cuenta propia... Yo solo soy uno más... — Calier comenzaba a molestar a Mark, esa actitud tan negativa no debía formar parte de la vida de un jugador, por eso mismo él ignoraba sus propias emociones negativas.

— Nunca brillaras si te escondes en la luz del resto — Con estas palabras, Mark se alejó un poco de Simon y caminó hasta quedar al lado de Syon, fue entonces que ambos jugadores del Fire Cloud le miraron de forma seria.

Tornado Inverso I: Shatter MachineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora