Buenos y malos comienzos

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Cuando les hablé del prólogo, expliqué que un buen comienzo es fundamental para enganchar al lector, y que no nos abandone después del primer capítulo. 

Según los que saben, hay temas con los que no es bueno comenzar una novela; no porque sean más malos que otros, sino porque son demasiado trillados:

Ejemplo de temas que no son recomendables para el comienzo de una novela:

1- El clima. 

Debo confesar que me gusta utilizar al clima como un protagonista más en mis historias, pero es un tema trilladísimo. Es muy común empezar una historia dando una idea de felicidad con un buen clima, y tristeza con un clima malo. Conviene no empezar así.

2- El protagonista despierta. Otro tema súper trillado: suena el despertador y arranca la historia, o el personaje principal despierta de un coma, de una borrachera, etc. 

3- Hacer una descripción eterna en el primer capítulo. Eso sí que no se puede hacer, porque corremos el riesgo de aburrir al lector y que no pase del primer capítulo. Lo ideal es arrancar con acción o un diálogo, e ir mechando las explicaciones de a poco, a lo largo de la trama.

4- Comenzar con un viaje. No es malo, pero también se ha usado demasiado.

5- Comenzar en el inicio de una estación del año. Es algo parecido al clima, y que puede hacer los primeros párrafos de la historia bastante aburridos si describimos días de sol radiantes, niños que juegan en el parque o cielos sin una nube. El lector se nos va a ir antes de que termine el día.

6- Nombrar muchos personajes y lugares en el primer capítulo. Vamos a lograr que el lector se confunda y se aburra.

7- Que nuestro primer párrafo sea una frase larga y descriptiva. Nos va a pasar lo mismo: vamos a aburrir al lector.

Hay algunos temas más que no es conveniente usar, como iniciar la historia con una puerta que se abre, o un personaje leyendo un libro, o comenzar un día normal que de pronto se enreda con un montón de circunstancias inusuales. 

Aclaro que en general no son malos inicios, pero el asunto es que muchos han sido usados hasta el cansancio, y que otros le quitan al primer capítulo ese impacto que debe tener para que el lector se enganche con nuestra historia.

Recuerdo que me enganchó una novela de Wattpad que en el primer capítulo mostraba a un niño que presenciaba el asesinato de su padre a manos de unos mafiosos. (Little Italy, se las recomiendo) El enganche no fue el morbo en sí, sino la sorpresa de leer algo totalmente inesperado, que dio vuelta el destino de ese niño, el protagonista.

Lo que aprendí escribiendo (Humilde manual de inicio a la escritura )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora