JungKook es un famoso modelo surcoreano de personalidad brillante y adorable, TaeHyung es un corredor de carreras ilegales con más adrenalina que sangre en el cuerpo.
¿Cómo demonios terminaron enamorados?
No sé, pregúntenle a SeokJin, el guapo herma...
JungKook entró a su habitación dando un portazo que logró sobresaltar a su hermano mayor, quien solo se quedó de pie frente a la puerta. Suspiró en su lugar pensando bien en qué decirle a su menor, pero nada se le ocurría, no había contemplado la idea de que reaccionara así a su nueva vida.
—JungKookie, sé que ahora estás enojado, pero necesito que comprendas que éste es mi nuevo trabajo, te adoro, sabes que nunca haría nada para lastimar a nuestros padres o a nuestra hermana, mucho menos a tí, pero tengo mis motivos, lo prometo...— guardó silencio esperando a que su hermano dijera algo, pero solo hubo silencio— bien, creo que estás cansado ahora, hasta mañana, pescadito.
El castaño escuchó los pasos de SeokJin alejándose por el pasillo, y en cuanto lo sintió lo suficientemente lejos, bufó liberando toda la tensión que tenía acumulada en los hombros. Se sintió algo mal por lo triste que sonaba la voz de su hermano, pero eso no le ganaba a su enojo.
¿Motivos? ¿Qué clase de motivos tendría alguien como Jin para meterse en esa clase de cosas? Había estudiado una carrera que era útil en donde vivían, era jóven, estaba sano, tenía amigos y una familia que lo adoraba y lo apoyaba en todo, ¿Qué motivos habría para ser corredor de carreras ilegales? SeokJin ni siquiera había tenido interés en los autos con anterioridad, al contrario, se había especializado en estudiar diseño industrial para otro tipo de áreas, nunca la automotriz.
No quiso seguir dándole vueltas al asunto y finalmente cayó dormido.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
L
os ojos de NamJoon se abrieron exorbitantes ante la nueva información que su mejor amigo le estaba dando. Tuvo que sostener bien su taza de té antes de que ésta se tambaleara aún más.
—Entonces, recapitulando...— tomó la taza con las dos manos— tu hermano...SeokJin— dijo casi como si quisiera confirmar que hablaban del mismo— es un corredor de carreras ilegales que es amigo de más corredores.
—Que sí, Joonie, ¡No puedo creerlo!— renegó con el ceño fruncido— y encima se atrevió a decirme que yo estaba sobrereaccionando— espetó antes de beber su té.
—Es un tema serio, te llevó ¿Cierto?— el castaño asintió— es peligroso, no solo por tu seguridad, sino por tu fama, ¿Qué pasaría si de la nada se filtran fotos tuyas estando en un lugar de arrancones ilegales o lo que sea que sea eso? Creo que deberías de hablar con él acerca de eso y alejarte rápido, puedes dañar tu imágen.
JungKook volvió a asentir con los ojos fuertemente cerrados, era consciente de eso, de hecho había sentido miedo de que alguien de allí lo reconociera, pero sería difícil saberlo, sobre todo después de casi ser atropellado por ese alto, pelinegro, musculoso y...
Concentrate, JungKook.
—Sí, creo que será lo mejor, aunque lo que me preocupa ahora es mi familia, ¿Qué pasará si Jin-hyung se mete en problemas y eso involucra a mis padres? O peor aún, a mi hermana— dejó la taza sobre la mesa con una expresión agobiada— apenas está iniciando a trabajar y esas cosas, ningún hospital la querrá aceptar si se enteran de éstos, sabes bien que los estigmas son muchos y muy fuertes aquí.