Yo solo me di la vuelta y camine lo más rápido que pude, en un momento volteé para ver si me seguía y estoy casi segura que lo ví sonriendo y pasando uno de sus dedos por su labio inferior mientras me veía, rápido tome mi mochila y salí de la biblioteca aún podía sentir mis mejillas calientes, no podía dejar de pensar en lo mucho que se acercó a mi.
Llegué al salón donde tomaría mi próxima clase pero antes de entrar fui al baño para mojarme la cara he intentar calmarme, al entrar ví que aún no llegaba el profesor, así que me senté y me recosté sobre mis brazos en lo que llegaba y terminé quedándome dormida hasta que alguien me despertó.
-Hey pastelito despierta ya dará inicio la clase- dijo mientras me movía.
Yo no reconocí la voz al momento, pero me incorpore y lo volteé a ver.
-Esto debe ser una broma- dije sorprendida- tu qué haces aquí no puedo creer que me siguieras hasta mi clase.
En ese momento me pare tome mi mochila dispuesta a cambiarme de mesa pero el me tomo del brazo y con un movimiento ágil me volvió a sentar.
-Que demonios pasa contigo- alce mi mano para abofetearlo pero el agarro mi mano y ahora me tenía atrapada por mis dos brazos- hey suéltame ya.
-Pastelito cálmate porfavor- y el hijo de puta se reía de mi- vamos relájate pequeña fiera, si estoy aquí es por qué también estudio esto.
-Bueno si es así suéltame ya- Intentaba soltarme de su agarre- que esperas hazlo ya.
Se lo ordene y parece que eso lo sorprendió, porque abrió mucho sus ojos dejándome ver el hermoso color verde que tenían y llenos de un brillo que quizás era curiosidad, me dedico una media sonrisa cerró sus ojos por un momento y movió su cabeza en negación.
-Está bien pastelito te soltaré- yo me relaje al escuchar eso- pero será con una condición- dijo mirándome intensamente- te quedarás aquí conmigo y si te mueves a otra mesa me iré contigo.
Con todas su expresiones me dejó en claro que esto estaba siendo muy divertido para el.
-Si no me queda de otra está bien, ahora suéltame- el lo hizo y yo me acomode- no quiero que hagas nada extraño.
-No puedo prometer eso pastelito- se recargo en su brazo y me guiño un ojo.
-Y por qué me llamas "Pastelito"- le cuestione- mi nombre es Melody.
-Valla hasta tu nombre es tierno- este tipo no tenía limites- pero lo siento aunque tú nombre me gusta yo seguiré diciéndote pastelito.
Yo estaba perdiendo la paciencia con el y cuando le iba a responder, me percate que toda la atención del salón estaba en nosotros y todo por culpa de este tonto deseguro hicimos mucho shou.
-Haz lo que quieras- acomode mi mochila y saque mi cuaderno- y a todo esto como te llamas tipo extraño.
Mi comentario solo hizo que se riera y me viera con más curiosidad, este chico definitivamente era raro.
-Pense que nunca lo preguntarias pastelito, soy Noah Weber- me miró esperando una reacción.
Yo solo lo mire por unos segundos, diablos ahora entendí por qué toda la clase nos veía el era uno de los icónicos Weber, eso a mí me importaba poco pero no me gustaba llamar la atención.
-Muy bien Noah- dije con disgusto- ahora déjame tomar mi clase en paz.
-Valla no dejas de sorprenderme pastelito- rio y no digo nada más.
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La Luna de los Lobos
RandomMely es una chica normal pero con secretos muy oscuros, obligada a adaptarse a todo lo que la vida le mandé, cuando piensa que por fin su vida está tomando un camino sólido, llegan a su vida los icónicos hermanos Weber que le enseñan que sus demonio...