~💙Mi Chica De Ojos Azules💙~

Capítulo 62: Fin

(Victoria)

-¿Estas segura que puedes hacer eso?- pregunté aún no muy convencida

-Poder puedo pero tendría que hablar con ella-

-¿Y cómo harás eso?-

-Estoy conectada a ella de una forma muy compleja con que mientras que no muera puedo hablar con ella aunque esté inconsciente- cada día flipo más con esta chica

-Esta bien hazlo-

-¿Estás segura?, sabes lo que conlleva eso?-

-Si, que yo moriría- respondí

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(Natalia)

-¿Dónde estoy?- fue lo primero que me pregunté nada más abrí los ojos.

Lo último que recordaba era que un coche había salido volando y la sensación de un golpe fuerte para luego aparecer aquí. Al recordar el golpe rápido me toque y mire la tripa para ver si todo estaba bien

-Menos mal- suspiré aliviada al ver que todo estaba en orden.

Lo primero que tenía que hacer, como siempre, era saber dónde estaba, es decir, situarme.

Mire a los lados y solo vi negro, literalmente, todo mi alrededor era negro y no podía estar a oscuras porque me veía a mi misma con claridad con lo que estaba en lo que creo que es una sala negra. Si me centro más creo que puedo llegar a escuchar voces pero no estoy segura de ello, así que por el momento caminaré un poco para ver si veo algo o me choco contra algo, así podré saber si estoy en una habitación.

Con certeza creo que puedo decir que no se donde coño estoy, llevo caminando un buen rato y me duelen los pies, pero no encuentro ni una sola pared ni nada, además de que creo que estoy andando en círculos porque si no no tiene sentido

-Lo que daría por tener una silla- dije cerrando los ojos y mirando hacia arriba, pero para mí sorpresa cuando volví mi mirada al frente pude ver un pequeño sillón con una mesita al lado que se veía muy acogedor así que fui hacia allí y me senté - No sé de dónde has salido pero gracias- dije al aire.

Me quedé allí sentada acariciando mi tripa y pensado donde estaba Victoria y donde estaba yo claro está pero más me preocupaba no ver a Victoria a mi lado, últimamente dependía mucho de ella ya sea a la hora de hacer cosas como emocionalmente y no tenerla a mi lado me hacía pensar lo peor y llorar.

Mire a los lados pero todo seguía oscuro hasta que oí una voz

-Se te ve cómoda- al girarme vi a Kara a la cual le sonreí

-Pues qué remedio, la tripa pesa- conteste con gracia

-Tenemos que hablar-

-¿Estoy muerta verdad?- dije sin rodeos

-Algo así, ahora mismo estás en el hospital a punto de morir, pero el problema es que tu mujer y yo hemos hecho otro trato que puede que te guste-

-Otro trato, acaso hubo un primer trato- Kara asintió

-Si, aquel día en tu boda cuando fui a saludaros hable con ella y le conté todo, solo que no le dije que ibas a morir justo antes de dar a luz si no que le mostré como las dos estabais felices y digamos que eso no le ha hecho mucha gracia-

-¿Por qué no se lo dijiste?-

-Porque entonces no hubieras tenido el hijo, es difícil de entender pero no vengo por eso, hace un tiempo hable con mi Natalia y me dijo que hay una solución para que tu no mueras- sabia que la solución no seria la mejor pero aun así quería oírla