Un normie entre excluidos- Miércoles x Tn

19-Agradable sorpresa

Enid pasó mucho miedo por las trampas mortales que tenía la mansión. Por suerte, Tn ya se las sabía de memoria así que fueron esquivando todas y cada una de ellas.

—Uy, que flores tan bonitas—dijo señalando el jardín—¿podemos verlas?.

—Creo que no te gustará, tienen dientes y te muerden—ante eso, ella tragó saliva asustada—¿y afuera que puede pasarnos?.

—A mi me atacó una avispa gigante, tenía el tamaño de un perro—Enid se aferró a este muerta de miedo.

—Será mejor ir a la habitación y ver algo en el ordenador hasta que regresé Miércoles—propuso la loba.

—Pues sí, es lo mejor que podemos hacer.

Durante la mañana, vieron un par de cosas, Tn estaba sorprendido que llegase la cobertura allí pero según parece, se modernizaron ya que para las cosas de Nevermore necesitaban de la tecnología.

Miércoles llegó y comieron en la habitación. Large se llevaría los platos dejando a los tres solos y charlando. La gótica decía que había sido una mañana provechosa para ella, había logrado terminar una máquina de tortura que llevaba mucho tiempo intentando fabricar.

—¿Te gustaría probarla Enid?—ella negó con la cabeza—lástima, ¿mon cheri?—miró a este quien también negó.

La tarde la pasaron viendo algunas películas pues estaba lloviendo y apetecía estar en el cuarto con la manta. Miércoles se tapó para estar acurrucada con Tn aunque no quería demostrar demasiado afecto delante de la loba pues sabía que cuando regresasen a la academia, se podría ir de la lengua.

Y en la noche, tras la cena, un terrorífico silencio reinó en todo el lugar. Fue roto por los cuervos, pero sobretodo por los aterradores gritos de los prisioneros que según Miércoles, era un sonido relajante para dormir.

—¿Puedo dormir con vosotros?—preguntó Enid—tengo miedo de tanta oscuridad.

—No—contestó Miércoles. Pero al verla temblar y la cara de Tn, se resignó y aceptó.

Las horas fueron pasando y Tn se despertó, todo estaba muy oscuro y apenas veía algo entre tanta oscuridad. Abrazó a su chica y la llevó hasta él antes de besarla un poco, la notaba despierta así que siguió con los besos. Extendió la mano por sus piernas hasta llegar a la zona más íntima haciendo que soltase un ligero gemido. El chico ahora fue a por su cuello de manera suave, lento y tierno como siempre hacia.

Pero en cierto punto, ya más despierto y encendido, aumentó la intensidad de los besos en el cuello haciendo que su chica gimiera un poco más fuerte.

—¿Se puede saber qué pasa?—preguntó su novia.

—Shhh, despertarás a Enid—susurró este.

La luz se prendió y tardó en acostumbrarse a la luz. Entonces parpadeó varias veces, Enid estaba a su lado, jadeante, con algo de sudor, roja, camisa algo abierta y las manos casi sobre su cabeza. Miércoles le miró, se fijo que su mano aún seguía en la zona.

—¡Lo siento mucho, pensaba que eras tú!—se excusó este—estabas a mi lado.

—Si, pero nos levantamos ya que Enid tenía que ir al baño y podía pasarle algo—replicó Miércoles—¿acaso no puedes controlar tus malditas hormonas?.

—Es tu culpa por ser tan bonita, sexy e irresistible—dijo mirando a otro lado.

La loba se acomodó y rodeó con sus brazos a Tn hasta llevarlo sobre ella.

—Tn...Tn...ahora no me dejes así—rogaba ella—tocas de una forma tan...tierna...y besas muy bien—comentó roja.

—¡Lo sabía!—dijo este—¿ves cómo beso bien?.

—Normalmente mataría a Enid...pero...—hizo una pausa—tendrás que arreglar esto.

—¡Espera, no puedes hablar en serio!—replicó este.

Miércoles dijo que tenía que arreglar los problemas que él había creado. No le dio tiempo a decir nada más ya que Enid comenzó a besarlo mucho. El chico sentía un fuerte calor, encima su chica estaba mirando. Intentó resistirse en vano.

El chico se impresionó por lo bonita que resultaba Enid sin ropa. Bajó hasta su entrepierna y lo dejó desnudo también. 

—Vaya...que suerte tienes roomie—dijo alegre.

Enid intentó hacerlo lo mejor posible.

—Auch...Auch...Enid...—se quejó este.

—Perdón...es...mi tercera vez...no soy buena en esto—la joven estaba nerviosa.

—¡Dios, deja que te enseñe!—Miércoles se quitó la ropa y se puso a su lado—mira y aprende. Ah, y ni una palabra o te mataré.

Tn sintió un placer que nunca había sentido antes. Este acabó agotado y sudado mientras ellas reposaban sobre su pecho recobrando también el aliento. Cuando no había sido una, había sido la otra. Enid le dio las gracias pues era la primera vez que se sentía tan sumamente querida.

Ya en la mañana, despiertos, se fueron vistiendo. Tn se ponía los pantalones cuando vio a las dos chicas sin ropa de cintura para abajo. Se acercó poniéndose en medio y les dio una fuerte cachetada a las dos.

Ellas lo miraron sorprendidas.

—Lo siento, siempre quise hacer esto—se rascó la mejilla nervioso.

—Idiota—dijo ella aparentando estar molesta.

—A mi no me importa—dijo la loba dándole un beso de buenos días.

—Me apetece mucho hacerlo—comentó mirando a ambas.

—No, ahora vamos a desayunar—respondió su novia—ahora dejad vuestras hormonas, los dos—dijo viendo la intención de la loba.

Después de un buen desayuno para recuperar fuerzas de la noche anterior, los tres salieron a dar una vuelta. Miércoles les hizo un pequeño tour por la parte más peligrosa de la mansión pero se negaron a bajar a las mazmorras pues allí estaban las máquinas y ladrones atrapados.

—Anoche entraron tres más—comentó—¿seguro que no queréis ir allí?.

Ambos negaron en rotundo.

—Justamente es la zona más divertida—dijo.

En la tarde, Enid se echó una siesta mientras Tn y Miércoles estaban tumbados juntos. La gótica le dio unos besos ante la sorpresa de este.

—Quiero unos pocos mimos—susurró.

—Claro—ambos empezaron a besarse tapados. Miércoles estaba siendo muy cariñosa cuando Tn recibió un beso en su cuello. Era Enid.

—Mira que hacer eso mientras estoy cerca...pervertidos—dijo ella inflando las mejillas.

—Enid...

—Anda...comparte a Tn un poquito.

Su chica se quedó pensativa un poco antes de mirar a su chico que se encogió de hombros.

—Que remedio—dijo finalmente.

Finalmente tuvieron sus mimos.

Pero todo lo bueno se acaba y llegó el día de regresar a la academia. Llegaron juntas no sin antes dejar a Tn en su casa.

—Tienes suerte de tener a alguien como Tn

—Lo sé

—Besa muy bien y...

—Enid, ni una palabra más, lo que pasó en la mansión se queda en la mansión

—Claro compi.

Pronto empezarían los preparativos para la obra de teatro.

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo :D