Un normie entre excluidos- Miércoles x Tn

6-Tn y Miércoles

Ese día Tn tenía libre así que decidió ir por los bosques ahora que era seguro. Para no ir él sólo y perderse, le pidió a Enid y Miércoles si le podían acompañar. Ambas accedieron. Miércoles quería conocer más sobre él, y de paso, si ocurría algún peligro, ver como reaccionaría. Tal vez actuar débil frente a los matones era todo mentira. A lo mejor sino llega aparecer ella, se los hubiera quitado de encima.

Llegó a la hora indicado al lugar de quedada.

—¿Y Enid?—preguntó este mirando extrañado.

—No viene, tenía que atender unas cosas—contestó—¿vamos?.

—Claro.

Miércoles llevaba siempre cuchillos por si salía peligro. Esperaba que al estar a solas con él en un lugar aislado de la gente, quizás muestre su verdadera forma. Cosa decía que era un normie corriente, pero ella tenía el pensamiento de que no lo era.

—¿Qué tal las clases?

—Aburridas, y las materias son para niños

—No creo que sea para tanto.

Caminaron por el sitio, Tn se detenía en ocasiones para contemplar alguna planta. Miércoles le advertía de que era venenosa y que debía tener cuidado. 

—Eres muy lista—dijo este sonriendo—ojalá fuera tan inteligente y fuerte como tú.

Ella no dijo nada, solamente volteó el rostro.

Continuaron hasta llegar al lago, allí se sentaron para descansar un poco. Miércoles miraba el rostro del chico contemplado el agua.

—¿Sabes qué fue aquí donde morí?—al decir eso, Miércoles se puso en alerta.

—¿Cómo dices?

—De pequeño me ahogue en el agua, era muy pequeño y no sabía nadar...mis padres al ver mi cuerpo hicieron un pacto con alguna clase de demonio. Trajeron de vuelta mi alma del mundo de los muertos. Y a cambio...—dijo serio.

—¿A cambio?—llevó la mano al cuchillo que tenía en la bota.

—Debería llevarles un alma cada año...es por eso que estás aquí—al voltear, la miró tan seria que Miércoles se asustó.

Luego el chico se echó a reír.

—¡Tenías que haberte visto la cara!—no paraba de reírse—¿de verdad te lo has creído?.

Miércoles volvió en sí y dijo que a la próxima broma lo mataría.

—Lo siento, pero debes reconocer que ha sido divertido.

La chica esbozó una leve sonrisa, tenía su punto a favor, hacer esa clase de bromas.

—Deberías probar con Enid—dijo—seguramente se asustaría mucho.

—Oye, podemos probar—Tn se secó las lágrimas de risa.

Estuvieron allí un buen rato, tranquilos, mirando el agua sin decir nada mientras sentían la suave brisa golpear sus caras. Tn le comentó que de pequeño venía allí con su padre a pescar en familia. Pero que debido al trabajo y demás, apenas tenían tiempo y energías para ir de nuevo.

La joven miraba a este, se preguntaba muchas cosas. Pero cuando lo miraba directamente a los ojos, las dudas empezaban a disiparse.

—Me lo paso muy bien contigo Miércoles—comentó—si tienes que volver me dices.

—No, hay tiempo todavía

—Entendido.

Miércoles a veces no podía dejar de recordar las escenas de los besos. Ella encima mientras pedía ser besada, amada, abrazada y recibiendo un montón de amor. Algo que consideraba absurdo. Pero eran tan reales que su cuerpo se sentía raro cuando regresaba de esas visiones.

Ningún libro ayudaba a entender y su madre siempre le decía lo mismo, que era su propio corazón tratando de ayudarla a entender su futuro. Eso le había impedido concentrarse a la hora de escribir ya que cuando se sentaba, sin quererlo, describía la escena con letras.

—Será mejor regresar—dijo este poniéndose en pie—se está haciendo tarde y tenemos que andar todavía un rato.

Durante el camino de vuelta, el chico iba tarareando, mirando la naturaleza y respirando el aire puro que tanto le gustaba. Miércoles en ocasiones iba situada detrás suya, mirando a este con una sonrisa en su cara, siempre sonreía el muy idiota.

—Mira, ahí está Enid—señaló en la distancia.

Se acercaron y ella le dio un abrazo. Se pusieron a hablar sobre chismes pues Tn también era algo chismoso. Según parecía, Tn le daba bollos y cotilleos a la loba. La pregunta era...¿qué sacaba Tn a cambio?.

Al verlos hablar tan sonrientes, Miércoles sentía algo dentro suyo, ¿celos?, quizás Enid pudiera sacarle información a Tn mejor que ella.

—Y entonces...ploff—ambos se reían.

—Espera que traigo unos bollos que aún no he comido—echó a correr.

—Enid siempre está muy animada

—Si...un asco

—Tampoco es eso mujer

—¿Te gustan las chicas con ese carácter?

—Tengo como todos mis gustos...por ejemplo mi amigo dice que le gustan las chicas con pechos tan grandes que puedan arrasar una ciudad

—No debería dejarse llevar por sus hormonas. O tal vez acabe dejando a una mujer embarazada.

Enid regresó al cabo de poco, se sentaron y comieron los bollos.

—Yo si estuviera en tu tienda me comería todos

—Los acabarías aborreciendo

—Yo creo que pesaría cien veces más la loba glotona.

Al decir eso, Tn se rió antes de recibir un golpe por parte de la loba. Realmente le había hecho mucha gracia aquel comentario.

Enid los puso al corriente de todos los cotilleos, Miércoles ponía la mente en blanco para no escuchar mientras que Tn asentía, seguramente haciendo lo mismo.

—Debo regresar adentro a hacer unas cosas, nos vemos Tn—le dio dos besos y se fue adentro.

Miércoles se quedó perpleja cuando la vio hacer eso. Al igual que el chico. No entendía mucho de las relaciones humanas y menos la de los adolescentes pero lo normal para Enid habría sido darle un abrazo de los suyos. En cambio esa acción parecía de gustarle.

Finalmente pudo reaccionar y decir algo para romper el hielo.

—Parece que le gustas—dijo ella.

—Tiene novio, además, solamente somos buenos amigos.

Ya iba siendo hora de regresar a casa. Tn caminó un poco hasta la parada. Miércoles no había logrado averiguar nada de él, pero lo había pasado bien. Aunque le molestaba estar en las mismas que antes.

—Miércoles...

—Dime.

El chico se quedó pensativo durante unos pocos segundos cuando escucharon llegar el autobús a la parada. De este bajaron unos cuantos alumnos de la academia que saludaron a la joven. El conductor bajó un momento a mear mientras el resto de pasajeros esperaban para regresar.

—Yo...¿te gustaría ir mañana al cine?.

Ella abrió los ojos.

—Si, Miércoles Addams...te estoy pidiendo una cita—dijo firme y armándose de valor.

La gótica se quedó viendo a este que aguardaba nervioso la respuesta.

¿Debía aceptar y tratar de seguir investigando?.

Continuará...

Espero que les haya gustado

Un saludo :D