25.

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Nina cayó rendida en mis piernas, se quedo dormida con la cabeza sobre mi regazo encima del capo del auto, mientras le contaba la vergonzosa anécdota de cuando invite a salir a Caroline McAdams, la chica más bonita de la escuela de sexto grado. Ella se reía, pesadamente, sus ojos se abrieron y resplandecieron en la oscuridad de la noche.

- Te amo demasiado, Shawn Mendes -Susurró y luego volvió a cerrar los ojos, acurrucando su cuerpo- Lo siento mucho, lo siento tanto....

- No te disculpes, Nina. Ya pasó. Yo también te amo.

Ella sonrió tristemente.

- Mañana será todo muy distinto, Shawn. Quiero que me perdones.

No comprendí, así que la tome entré mis brazos y la metí al auto para volver, besé su frente.

- Mañana será todo igual, no estés asustada. Estaré ahí.

Sentí como sollozaba en el asiento, mientras manejaba. La mire confundido, asustado.

- ¿Qué pasa, Nina? -Estacione el auto frente a su casa y quité las manchas debajo de sus ojos, las lágrimas que se habían derramado.
- Nada -Sonrió acariciando la guitarra entré sus manos- Sólo que nunca había visto una guitarra tan bonita.

Ella me besó, en los labios, suavemente, dulce, sin prisas, como si tratara de memorizarlos. Se separó y acarició mi mejilla, susurró unas palabras y se marchó.

"Mañana será todo diferente, adiós, Shawn."

She Bad | s. m.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora