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Ash
-Ser profesionales-

-Deberías entrar, es tarde y ocupas descansar—digo.

-Debería...

-Te miras tan bien hoy—susurro.

-¿Eso crees? Tal vez es porque traigo tu saco puesto.

-Te queda muy bien, deberías quedártelo.

-Debo entrar...

Dal se pega la puerta de la entrada de su casa, estamos despidiéndonos pero no puedo irme, quiero seguir con ella.

Toma mi corbata ligeramente y juega con ella. Yo me acerco un poco y pongo mi brazo en la pared para un mejor agarre.

-Entra y duerme—susurro—mañana tenemos un largo día.

-Mhm... espera... no vamos a salir en público así todavía ¿verdad? Quiero decir, acaba de pasar lo de la demanda, lo de Kim, y... además debemos ser profesionales con lo de la colaboración.

-Cierto... podemos... intentar mantenerlo en secreto por un tiempo, si tú lo prefieres.

-Sí—sigue moviendo mi corbata.

-Aunque... será difícil...

-¿Por qué?

-No podría hacer esto—me acerco a besarla.

No soy capaz de soltar a Dal desde que ahora somos algo más. Me encanta besarla, me encanta tenerla cerca, me encanta verla sonreír.

-Mm... yo tampoco soy tan fuerte. Bien, iré a dormir. Te invitaría a pasar pero tengo visita, así que—se ríe.

-Buenas noches, Dal.

-Buenas noches, Lee.

La veo entrar a su apartamento y yo cierro los ojos emocionado. No puedo creer lo que acaba de pasar esta noche, mi niño de ocho años debe estar muriéndose ahora mismo.

Notas CruzadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora