Las cámaras se habían apagado hacia ya un rato, y todos los concursantes estaban desperdigados por la academia, algunos en la terraza, otros en los sofás, algunos ya en la habitación...
Elizabeth, por su parte, estaba en un box, con sus manos sobre el piano, los ojos cerrados y tocando alguna canción que se sabía de memoria de tanto tocarla. Poco después empezó a cantarla, le encantaba aquella canción, siempre le transportaba a años atrás. Cuando terminó de tocarla, alguien se asomó por la puerta del box.
— Me encanta como cantas. — Dijo Chiara sentándose al lado de Elizabeth, la cuál sonrió de manera suave.
— Gracias, tú también cantas muy bien.
El silencio inundó la habitación. Nunca antes habían hablado, a pesar de haber estado en el casting final juntas, no se habían dirigido la palabra. No se habían dirigido la palabra, pero si que se habían dirigido miradas. Miradas llenas de significado, miradas que dejaban ver las ganas que tenían de hablarse, de conocerse.
Pero, a pesar de dirigirse miradas, nunca se encontraron, siempre miraban cuando la otra no estaba mirando, por lo que siempre pensaron que eran la única de las dos que jugaba a aquel juego de mirarse.
La pelinegra estaba de pies al lado de la puerta del box, mirando hacia el suelo mientras jugaba con sus dedos. Tenía el pijama y las gafas puestas, algo caídas, era algo que siempre le pasaba, pero pocas veces se daba cuenta de aquello.
— ¿Quieres sentarte? — Preguntó Elizabeth haciéndole un sitio a su lado, al ver que la menorquina no se había movido de la puerta.
Chiara asintió suavemente y se sentó al lado de la rubia, en frente del piano. Estaban realmente cerca dado el poco espacio que había allí, pero parecía no importarles. Sus brazos rozaban, causando un cosquilleo en el interior de ambas.
— ¿Qué tal el reparto de temas? — Chiara miró hacia la rubia cuando esta volvió a hablar, en un intento por cortar aquel silencio, aquel silencio algo incómodo.
— Bien, es decir, la canción me gusta y Paul es realmente majo.
— ¿Pero...? — Siguió Elizabeth, sintiendo que Chiara tenía algo más que decir. La pelinegra dejó salir una suave risa, le parecía irreal que Elizabeth la conociese habiendo hablado tan solo un par de veces. — ¿Qué te hace gracia? — Chiara alzó ambos hombros, mirando a la sonrisa de la rubia.
— Nada, nada... — Negó la pelinegra con una pequeña sonrisa, volviendo al tema de antes.— Pero me hubiese gustado que me tocase con alguien más. No me malinterpretes, me cae bien Paul, pero siendo la primera gala prefería que me hubiese tocado con alguien con quién ya hubiese hablado antes...
— No te preocupes, tendrás tiempo de que te toque con esa persona. — Ojalá, pensó Chiara, mirando hacia el piano.— ¿Puedo saber quién era esa persona?
Por un momento, Chiara dudó. ¿Qué debía decir? ¿Confesarle a la chica que acababa de conocer que quería cantar con ella porque llevaba observándola desde que la vio en los castings finales? Eso podía sonar muy raro, podía parecer una acosadora, por lo que optó por otra opción.
Mentir.
— Violeta.— Susurró, jugando, de nuevo, con sus dedos. Elizabeth asintió suavemente, con un sentimiento extraño en su interior.
Me hubiera gustado que admitiera que quería cantar conmigo pensó Elizabeth.
Me hubiera gustado admitir que quería cantar con ella pensó Chiara.
Y la rubia, por un momento, se asustó de sus pensamientos. ¿Por qué se había sentido tan decepcionada cuando Chiara mencionó el nombre de Violeta en vez del suyo?
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El juego de quererte en secreto [Chiara OT 2023]
Random― No puedo fingir que no siento nada cuando te veo... ― Pues no lo hagas, no finjas, deja de quererme en secreto. ☆☆☆ La academia de OT, un lugar donde nada es privado, donde tus acciones son vistas por más de diez mil espectadores, donde cada fallo...